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Minutos después de haberse tomado la fotografía oficial de los 22 países asistentes a la IV cumbre Celac en Quito, la capital de Ecuador, un accidente asustó a algunos presidentes que se encontraban camino a la sede Unasur.
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Mientras un programa ecuatoriano que entrega flores a los líderes se dirigía a la Mandataria Michelle Bachelet y a su par brasileña Dilma Rouseff, una barrera de vidrios que separaba el sector de prensa de la seguridad y el camino de losgobernantes se rompió provocando un estruendo y asustando a las jefas de Estado que inmediatamente fueron apartadas del sector.
El presidente venezolano Nicolás Maduro, quién las seguía en la procesión, exclamó un «calma nada ha pasado» mientras las mandatarias se devolvieron a preguntarle a los miembros de la prensa si se encontraban bien.
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Mientras algunas periodistas presentaban pequeños cortes productos de los vidrios, y personal de seguridad se apostaba en el sector los jefes de Estado siguieron su rumbo hacia la sede Unasur.
Pasado el accidente, el presidente de Ecuador, Rafael Correa, bromea exclamando hacia las gobernantes: «Tenían que tumbar algo».
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