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Apenas llegó al Registro Civil comenzó entregando pasaportes, uno de los documentos más solicitados -y que más estragos provoca actualmente- en los usuarios que durante 30 días han visto como la movilización de los trabajadores de este servicio, comandada por Nelly Díaz, aún no tiene un punto de solución.
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En conversación con el noticiario T13, la líder de los funcionarios en paro aseguró entender lo que sufren los usuarios “pero también díganme que otra manera de negociar (hay), intentamos, pero no conozco otra forma”.
“Yo vengo de una madre muy fuerte, de una familia muy humilde, muy pobre, donde habían días que no había qué comer. La pobreza, las injusticias me hicieron fuerte”, complementó.
La mujer, que lleva más de 30 años de funciones en la institución aseguró que “han existido muchos ofrecimientos (para que ingrese a la política), en los cuales incluso le aseguran la “educación para mis hijos”, aunque reitera que no aceptó.
Por último, indicó que “cuando cumpla 60 años ahí voy a cambiar el carnet. Le digo a mis colegas que cuando vaya a hacer la fila me atiendan y no digan que viene a hacer esta vieja”.
De la misma forma, el espacio periodístico Informe Especial, de TVN, también dialogó con la máxima representante de los funcionarios del Registro Civil.
En esta entrevistas, la vocera expresó que “los problemas más extremos los tratamos de solucionar. Decimos que no tenemos turnos éticos, pero en la interna sabemos que sí”.
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“Nosotros somos el sentir de muchos trabajadores a los que se les ha prometido y no se ha cumplido. La autoridad no puede prometer algo que no puede cumplir”, indicó.
A continuación, Díaz derribó uno de los mitos que giran “en el 2013 cuando hicimos el movimiento estaba Piñera”, descartando así que votó por el ex presidente en la pasada elección presidencial, aunque tampoco confirmó su sufragio por Michelle Bachelet: “No diré por quién voto, eso es independiente de la lucha en el Registro Civil”.
Nelly Díaz lleva tres períodos al mando de los trabajadores, obteniendo en el último de ellos un 80% de adhesión, aunque en 2014 fue acusada de falsear firmas, alcanzando un gran poder de convocatoria en las mujeres, que al interior del Registro Civil son mayoría.
PUB/VJ
