Tiaras, tutús, capas de superhéroes. Así deberían poder vestirse los niños y niñas de las escuelas según la Iglesia anglicana en Reino Unido.
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Ello, sin estar sujetos a comentarios de parte de los maestros u otros alumnos, aseguró la Iglesia el marco de la publicación de una guía contra el acoso o intimidación ("bullying") en las escuelas.
La iglesia señaló que los escolares debería sentirse libres para explorar las posibilidades de "quiénes podrían ser".
El arzobispo de Canterbury, Justin Welby, quien es la cabeza de la Iglesia anglicana, dijo que la guía ayudaría a las escuelas difundir el mensaje cristiano "sin excepción ni exclusión".
La organización de derechos LGBT Stonewall expresó que los consejos ayudarías a prevenir el acoso y la intimidación.
Los consejos se emiten en el marco de una encuesta patrocinada por la institución Anti-Bullying Alliance que encontró que dos de cada cinco niños "esconden aspectos de su personalidad" por temor a la intimidación.
Estos son los resultados de la encuesta a 1.600 estudiantes de entre 8 y 16 años:
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- Casi dos tercios han sido testigos de personas siendo acosadas e intimidadas por ser "diferentes"
- Más de la mitad temen a ser percibidos como diferentes
- Casi un cuarto dijeron que cambiarían cómo se ven para ajustarse
La iglesia, que educa a un millón de pupilos en casi 5.000 escuelas, emitió su primera guía contra el acoso homofóbico hace tres años, pero ahora la ha actualizado para incluir lo que llama el acoso "transfóbico" y "bifóbico".
Encajonados
En su prólogo de la guía, el reverendo Welby escribió: "Debemos evitar, a toda costa, reducir la dignidad de cualquier individuo a un estereotipo o problema".
El alto prelado indicó que la orientación sexual nunca debería ser la base del acoso o el prejuicio, añadiendo que se ha hecho "progreso significativo" desde que la guía contra el acoso homofóbico fue emitida en 2014.
El documento, titulado "Valorando a todos los hijos de Dios", detalla que los menores deberían poder jugar con "muchos mantos de identidad", sin que se les catalogue o se les acose, "algunas veces literalmente encajonándolos".
La guardería y la escuela primaria, en particular, son épocas de "exploración creativa", indica, donde los menores deberían poder escoger un tutú, una tiara y tacones —o un caso, cinturón de herramientas y capa de superhéroe— "sin expectativa o comentario".