BBC Mundo

La curiosa historia del hombre que vigila el volcán más activo de Ecuador desde una sencilla caseta de madera en un árbol

Carlos Sánchez tiene 75 años y pasa la mayor parte de su tiempo en una caseta de madera frente al volcán Tungurahua, en Ecuador, uno de los 10 más activos del mundo. Desde allí, este vulcanólogo aficionado, observa cada cambio de la actividad volcánica. Y lo hace por una promesa religiosa hace casi 20 años. Pero un columpio para sus nietos que casi toca las nubes hizo que su lugar se hiciera famoso.

Todas las mañanas, antes del amanecer, Carlos Sánchez, de 75 años, reza en su choza de una habitación, toma un par de binoculares y sube lentamente a la casa de un árbol solitario que se inclina precariamente sobre el borde de una montaña.

PUBLICIDAD

Desde su posición elevada sobre los nubosos pliegues de los Andes ecuatorianos, Sánchez mira a través de lo que parecen parches en un valle color esmeralda hacia el imponente cráter de Tungurahua

Se trata de un estratovolcán activo cuyo pico está a más de 5.000 metros sobre el nivel del mar y cuyo nombre significa "garganta de fuego" en la lengua local quechua.

Sánchez luego explora los profundos barrancos y abismos que se ciernen peligrosamente por las laderas del Tungurahua hacia la ciudad natal de su familia, Baños.

  1. Impresionantes imágenes de la erupción del volcán Tungurahua en Ecuador

"En este momento ella está tomando un descanso", dice Sánchez sobre la montaña, alejándose del peñasco y doblando con cuidado su rodilla enferma.

"Mejor alimentar a los pollos antes de que llegue todo el mundo", añade.

Conocido en Baños como el "observador del volcán", Sánchez es el miembro más antiguo del Instituto Geofísico de Ecuador y la única persona en el mundo que opera una estación de monitoreo sísmico desde las ramas de un árbol.

En 2014, una pareja visitaba la Casa del Árbol cuando de repente el volcán Tungurahua empezó a despedir una columna de cenizas de 8.000 metros de alto. Esta foto se hizo popular por un reconocimiento de la revista National Geographic.

PUBLICIDAD

Tags


Lo Último