Peter Lane tiene 21 años, se graduó el verano pasado en Historia por la Universidad de Cardiff, en Reino Unido, y le gustaría encontrar un trabajo en consultoría empresarial.
PUBLICIDAD
Ya se postuló en 55 empleos y logró asegurarse 15 entrevistas, pero cree que la tecnología detrás del proceso le puso obstáculos en lugar de ayudarle.
Las entrevistas no salieron como él esperaba. "Son todo entrevistas por video, ni siquiera llegué a conocer a mis empleadores potenciales", le cuenta a la BBC.
"No tuve forma de saber si les impresioné con mis respuestas o con mi experiencia porque no hubo ninguna interacción humana".
Las cartas automáticas de rechazo fueron otro problema para Peter, quien hoy día hace una pasantía no remunerada para una empresa que del sistema de sanidad pública inglesa.
"Solo el 10% de los empleadores potenciales me comentaron sus impresiones", asegura. "Como buscadores de empleo, necesitamos saber dónde y cómo mejorar, ya sea en nuestro currículum, experiencia laboral o incluso personalidad".
Pero vivimos en un mundo de reclutamiento tecnológico. Y es mejor que nos acostumbremos a él.