"Las guerras comerciales son buenas, y fáciles de ganar".
PUBLICIDAD
Esa fue la particular manera en que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, defendió en Twitter los aranceles que dijo piensa imponer a la importación de acero y aluminio en su país.
Ese provocativo tuit de Trump vino a echar más leña al fuego de la inquietud que había desatado su anuncio del jueves de que colocaría aranceles de 25% al acero y 10% al aluminio.
- 5 claves para entender el arancel a las importaciones de acero y aluminio anunciado por Donald Trump
Brasil y México, las dos mayores economías latinoamericanas, figuran entre los principales cinco proveedores de acero a EE.UU., según datos del Departamento de Comercio de este país sobre los primeros nueve meses de 2017.
Ministros de Brasil y México realizaron gestiones esta semana en Washington para intentar limitar el impacto de las medidas que prepara la Casa Blanca, cuyos detalles oficiales se espera que sean revelados la semana próxima.
Según expertos, los aranceles anunciados por Trump durante un encuentro con ejecutivos industriales podrían dañar más a Brasil que a México.
Pero también suman un factor nuevo de tensión en la difícil renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN o NAFTA, en inglés) que EE.UU. lleva a cabo con México y Canadá.