BBC Mundo

¿Qué tienen que ver la orina y unas mujeres con una extraña enfermedad con el nacimiento de los sindicatos?

Un elemento químico cuyo impacto en la salud de un grupo de chicas irlandesas cambió las relaciones industriales hace 130 años en Reino Unido, donde nacieron los sindicatos.

En 1669, el alquimista alemán Hennig Brandt recogió orina en grandes cantidades, la metió en enormes cubas y la hirvió hasta que espesó.

PUBLICIDAD

A continuación añadió carbón y volvió a calentar la mezcla, sólo que esta vez a una temperatura de más de 1.500 ºC, lo que en sí era un logro asombroso.

El resultado fue un extraño líquido luminoso que ardía ferozmente cuando entraba en contacto con el aire y que Brandt pudo recoger bajo agua, donde mantenía un brillo más tenue.

El material se llamó fósforo -del griego phos, que significa luz, y forein, que significa traer-, y los alquimistas y protoquímicos de toda Europa trataron en vano de copiarlo.

Fue el mismo Brandt quien finalmente, en un momento de descuido cuando alardeaba en un bar, reveló el secreto, que se esparció rápidamente entre sus colegas y competidores.

Fósforo rojo

El hecho de que el fósforo fuera tan inflamable lo hacía un instrumento obvio para prender fuego y velas.

Y, cuando en el siglo XIX, dos empresarios británicos -el químico Arthur Albright y el comerciante John Edward Wilson- desarrollaron un proceso para extraer fósforo de huesos de animales, no fue difícil incorporarlo a la vida cotidiana de la gente.

PUBLICIDAD

"Los fósforos no suenan como una industria clave, pero en esa época no podías calentar la comida o el agua, o prender la luz… sin fósforos. Había fósforos en todas partes, en todas las habitaciones y se vendían en todas las esquinas de ciudades y pueblos", cuenta Louise Raw, historiadora social y autora de Striking a light.

El problema era que los fósforos del siglo XIX contenían una pequeña cantidad de fósforo. Fue eso lo que encendió una ahora legendaria disputa industrial protagonizada por las empleadas de una fábrica londinense.

Su huelga sentó las bases del movimiento sindical a nivel global.

Lucifer

Era tan fácil de usar que se volvió inmensamente popular.

PUBLICIDAD

Tags


Lo Último