Afirmación: Donald Trump y el presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, coinciden en que el mandatario estadounidense merece que se le reconozca el mérito por el inicio de las conversaciones de paz con Corea del Norte y la histórica cumbre con el líder norcoreano, Kim Jong-un.
Conclusión: solo la historia revelará qué influyó para que pudieran celebrarse estas conversaciones, pero todo indica que fue Corea del Sur la que impulsó el diálogo con el Norte, junto con la presión de China, que empezó a hacer que se cumplieran las sanciones.