Cuando está en Corea del Norte, Kim Jong-un se protege con un grupo de guardaespaldas vestidos de traje negro, conformado por tres círculos diferentes.
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En Singapur, con motivo de su reunión con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, hemos podido ver una versión modificada de este esquema.
Los que corren a la par de su limusina y aquellos que caminan a pocos metros de él forman parte de una elite llamada Oficina Central del Partido número 6, formalmente conocida como Oficina Principal de Adjuntos.
Este grupo forma el círculo más cercano a Kim y sus miembros son elegidos entre los reclutas del Ejército Popular de Corea (EPC) que cumplen con el servicio militar obligatorio.
El criterio de selección incluye la altura (deben tener una altura similar a la del líder supremo) y no deben tener ningún impedimento visual.
Deben demostrar ciertos logros o una gran aptitud en destrezas tales como la puntería (disparando un arma de fuego) y las artes marciales.
Finalmente, los escoltas son sometidos a un escrutinio riguroso sobre sus antecedentes familiares, que se remonta hasta dos generaciones anteriores.
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Muchos de los integrantes de este grupo están vinculados a la familia de Kim o a otras familias de la elite norcoreana.
Entrenamiento
Una vez los aceptan como guardaespaldas (rechazar el trabajo no es realmente una opción) deben seguir un programa de entrenamiento intensivo.
Este entrenamiento es similar al de las Fuerzas de Operaciones Especiales del EPC.
El programa incluye entrenamiento en el uso de pistolas, técnicas de evasión y una variedad de artes marciales.
