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La foto de un “partido de fútbol” tomada por monseñor Romero, arzobispo de San Salvador, en su juventud

Esta imagen de un grupo de niños jugando a la pelota fue tomada por monseñor Romero, el beato de la Iglesia católica asesinado en El Salvador en marzo de 1980.

La foto de un "partido de fútbol" que tomó monseñor Romero en su juventud

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Con el cuerpo en el aire y las manos aferradas al balón, un instante antes de desplomarse al piso.

Esta imagen —que bien podría tratarse de un juego de pelota o un partido de fútbol— fue tomada por Óscar Arnulfo Romero, más conocido como monseñor Romero, cuando era un joven sacerdote salvadoreño.

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Beatificado en 2015, el arzobispo de San Salvador fue asesinado por la ultraderecha en marzo de 1980, mientras oficiaba misa en la capilla de un hospital para enfermos terminales, por censurar el régimen militar y los abusos a los derechos humanos en su país.

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La fotografía, de una claridad y nitidez asombrosa para la época, fue publicada recientemente por el medio digital El Faro en el contexto del Mundial de Rusia.

Forma parte de la colección del Museo de la Palabra y la Imagen (MUPI) en San Salvador, un museo creado a fines de los año 90 para preservar la memoria de la guerra civil en el país, y que ahora se dedica a la investigación, rescate, preservación y difusión del patrimonio histórico y cultural de El Salvador.

Fotógrafo aficionado

Romero era aficionado a la fotografía, y cuando viajaba le gustaba hacerlo acompañado de su cámara.

Desafortunadamente, la información que acompaña a la imagen no es muy precisa.

Solo dice que la foto es de su autoría y fue tomada en un "lugar no especificado en el departamento de San Miguel, sin fecha".

Romero fue sacerdote en la diócesis de San Miguel entre 1944 y 1967, y en 1970 lo nombraron obispo.

Aprovechando que es época de fútbol, ahora que los equipos han sobrevivido la fase de grupos y están disputándose los octavos de final, El Faro recuerda una anécdota vinculada a esta competencia.

Durante los tres años en los que Romero se desempeñó como arzobispo de San Salvador, se disputó un mundial: el de Argentina en 1978.

Y en una homilía celebrada unos días antes de la inauguración de esa competición, Romero hizo alusión al partido.

"También como nota de alegría, pues no olvidemos a los fanáticos, que están felices con la inauguración del Campeonato Mundial de Fútbol esta semana", dijo.

Y eso que dicen que no le gustaba mucho el fútbol.


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