Cuando realicen la autopsia en el cadáver de Carey Dean Moore, los patólogos hallarán en su cuerpo rastros de Fentanilo, una droga 50 veces más poderosa que la heroína que cada año está causando miles de muertes por sobredosis en Estados Unidos.
PUBLICIDAD
Pero en el caso de Moore no habrá habido un abuso involuntario. Tampoco un suicidio.
Este hombre de 60 años de edad fue ejecutado este martes en la mañana en una penitenciaría de Nebraska para hacer cumplir una condena firme en su contra por el homicidio de dos taxistas.
- Scott Dozier, el condenado a pena capital en Estados Unidos que quiere morir
- ¿En qué países de América Latina se mantiene la pena de muerte?
Reuel Van Ness y Maynard Helgeland eran, además, dos veteranos de la guerra de Corea. Ambos fueron asesinados en agosto de 1979.
Moore fue condenado por lo ocurrido hace 38 años, lo que le convertía en el preso que más tiempo llevaba en el corredor de la muerte en Estados Unidos.
Escapar de la muerte
En esas casi cuatro décadas esperando su ejecución, Moore vivió momentos en los que su muerte parecía inminente pero también otros en los que daba la impresión de que nunca se llevaría a cabo.