"En Honduras tememos: morir de hambre o asesinados por las maras. Por eso, cuando oí de la caravana de migrantes, me atreví a dejarlo todo".
PUBLICIDAD
Antonio García es uno de los miles de hondureños que ha emprendido la marcha en un intento de llegar a Estados Unidos.
Cada migrante tiene una historia. Y la mayoría es dramática.
Así, miles y miles de dramas personales se agolparon el viernes en Tecún Uman, en la frontera entre México y Guatemala.
La caravana de migrantes, que salió en su mayoría de Honduras, rompió la valla de contención del puente que cruza el ancho río Suchiate, la frontera natural que separa ambos países.