No hay ninguna duda: la bebida por excelencia de la Navidad y el Año Nuevo, y en general de todas las celebraciones, es un vino francés de color dorado y lleno de burbujas: el champán.
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Cada año se producen 268 millones de botellas de esta bebida espumosa y, sólo en Nochevieja, se beben en todo el mundo 360 millones de copas de champán para festejar la llegada del Año Nuevo.
Aquí van diez curiosidades sobre el vino más efervescente del mundo.