Mucha agua ha pasado bajo el puente en los últimos 15 años de la televisión chilena, programas buenos, reguleques y malos, pero hay uno que ha logrado sobrevivir y que justamente este 2015 cumple 15 años ininterrumpidos al aire. Estamos hablando del llamado alguna vez el estelar del pueblo, “Morandé con Compañía”, conducido por el carismático y chacotero Kike Morandé.
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Porque podrán haber pasado muchas musas del Kike desde la inigualable Marlen Olivari, la simpática Señorita Jeannette, la bella Lola Melnick, la pirinola “Porotito Verde”, la hermosa “Blanquita Nieves”, hasta la revoltosa Carla Ballero, pero el programa aunque ya no las tiene sigue funcionando a la perfección. El secreto de la fórmula exitosa no tiene otro nombre que Kike Morandé Peñafiel, amo y señor del programa. Es el alma con sus risotadas que contagian, con la respuesta justa a un chiste y sus retos cuando alguien se sale de madre en la rutina.
Es un tipo empático, que cae bien y que su mayor capital es su credibilidad y saber reírse de sí mismo. La gente le cree y lo premia viendo el programa. Su otro gran capital es el genial Ernesto Belloni, con su personaje “Che Copete”; la académica de la lengua Paty Cofré; el gran Cristian Henríquez con sus múltiples personajes como Ruperto y Rupertina, entre otros. Y de un tiempo a esta parte se han ganado su lugar con trabajo y esfuerzo todos los integrantes de la sección “Detrás del Muro”, donde cada uno destaca individualmente, pero sobresalen Toto, Miguelito, Belén Mora y Laura Prieto.
Es verdad que ya no va franjeado de lunes a viernes, ahora sólo se exhibe viernes y sábado, pero en horario prime. Y aunque no lo crea, son los ganadores absolutos del rating, nadie les puede ganar. El año pasado promediaron 16,2 puntos de sintonía y este año parece que lo superarán.
De muestra un botón, el pasado viernes fueron líderes con 21,4 puntos de promedio, doblando a su más cercano perseguidor que fue CHV con 10,5 puntos. Y lo hicieron en grande con el minero Mario Sepúlveda como invitado estelar y con Stefan Kramer participando en algunos sketches. Uno no puede no reírse viendo el programa, porque está hecho para eso. Para reír, olvidarse que el sueldo no alcanza, que el Transantiago no funciona, que los políticos siguen sin hacer nada por la masa que los eligió y un largo etc. Qué decir del programa del sábado donde en una parodia a “The Voice”, tuvo a Carla Ballero de jurado y a Willy Sabor haciendo un cara pálida en el público.
Hace poco cumplió 61 años Kike Morandé y hoy hace dupla con la bella y correcta Vanessa Borghi, quien, sin ser una gran animadora, sabe amoldarse al esquema del programa y a las bromas que le hacen. El Kike puede estar tranquilo, tiene un gran programa y aunque pasen los años, él sabe para dónde va la micro y ha sabido hacer los cambios necesarios en para mantener el éxito. Se hace cargo de la contingencia pero con un humor sano y alegre. Larga vida al estelar del pueblo.
Kike no cambies, eres, fuiste y serás siempre el Rey de la Pachanga.
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