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El desafío del profesor como líder educativo y la necesidad de formar líderes que aprendan y trabajen en red

En Chile poco se sabe sobre cómo detectar y visualizar el liderazgo entre los actores educativos.

Juan Pablo Queupil, director del Centro de Investigación para la Transformación SocioEducativa (Citse) de la Universidad Católica Silva Henríquez (UCSH) y profesor del Magíster en Educación de la misma universidad, señala que “si queremos transformar la educación, la capacidad de aprender de manera continua y de conformar redes de trabajo deben estar presentes en los equipos profesionales de las escuelas”.

Pese a que el liderazgo educativo se ha convertido en un factor indispensable para promover la mejora escolar, en nuestro país poco sabemos sobre cómo detectar y visualizar el liderazgo entre los actores educativos, ya sean docentes o directivos.

Para abordar esta brecha, el académico encabezó una investigación que utiliza el Análisis de Redes Sociales (ARS) para examinar las interacciones de prácticas colaborativas en los procesos de enseñanza y mejora, y determinar los roles y patrones de liderazgo, a través de un cuestionario referido a actores educativos de establecimientos escolares del país, que poseen trayectoria de mejora en Simce y otras métricas. Basado en indicadores de redes del equipo docente y directivo, su frecuencia de interacciones, y la visualización de sus mapas de red, el trabajo de investigación se enfocó en detectar qué actores educativos están efectivamente en posiciones de liderazgo educativo.

El estudio encuentra que, más allá de los puestos de liderazgo formalmente designados en los establecimientos, los actores relacionados con el Programa de Integración Escolar (PIE) tienen un rol preponderante, donde la pandemia covid-19 ofrece un escenario que resalta este papel, debido a que muchos directivos y docentes interactuaron con ellos en busca de consejo y prácticas innovadoras para la mejora educativa. Asimismo, la investigación contribuye a comprender cómo se distribuye el liderazgo en la práctica, un tema poco estudiado en Chile.

El investigador resalta que la distribución del liderazgo y el trabajo colaborativo de los docentes son condiciones importantes para el mejoramiento escolar. De ahí la relevancia de formar a los líderes educativos en competencias a nivel personal y profesional para la colaboración, así como de aportar herramientas que les permitan diagnosticar problemas y diseñar soluciones junto a otros docentes.

Éstas son, justamente, algunas de las habilidades que se refuerzan y practican en el Magíster en Educación de la UCSH. En su calidad de director del Citse, destaca que se ha trabajado junto a otros académicos en la actualización de la oferta formativa para los líderes educativos, y que hoy existe una versión renovada del programa de magíster para docentes y directivos, que apunta a promover la reflexión sobre su práctica y que promueve la colaboración entre sus metodologías de aprendizaje.

El Magíster en Educación se impartirá en jornada vespertina dos veces a la semana, en la Casa Central de la UCSH, ubicada en calle General Jofré 462 (estación Metro Santa Lucía). Tiene una duración de cuatro semestres y comenzará en abril próximo.

El período de admisión para el año 2021 se encuentra abierto y la postulación se puede realizar de manera online. Los interesados pueden conocer más en postgrados.ucsh.cl y también revisar los estudios e investigaciones del académico Juan Pablo Queupil y el equipo docente del Magíster en citse.ucsh.cl.

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