Resulta una constante cuando dos personas deben acordar un tema laboral, o conversar acerca de lo que les sucede en sus vidas y pactan tomarse un café para lograr su cometido.
PUBLICIDAD
Pues bien, el café es una herramienta social, más allá de lo que signifique este brebaje de antaño. Pero nadie se ha hecho la pregunta de cómo nace, dónde y posteriormente cómo se masifica este líquido que proviene de granos.
Es que, pese a que la planta, denominada “cafeto’’, proviene de África, lo cierto es que los árabes fueron los encargados en convertirla en una de las bebidas más apetecidas en el mundo. Ellos impusieron la costumbre de beber de éste, a cambio de la prohibición del Islam de ingerir alcohol.
Pero vamos a las leyendas. Una de las historias más masificadas y que se ha transformado como la oficial tiene a un protagonista. Este es Kaldi, un afamado pastor que vivió en Etiopía del 300 d.C., quién se percató de que las cabras en un rebaño comenzaron a moverse de un lugar a otro y a comportarse de una manera muy particular. Estaban enérgicas y desesperadas.
Ante tal situación anómala, el pastor concurrió al lugar y se encontró con un particular arbusto del cual los animales se estaban alimentando en ese momento. Se trataba de una planta con bayas rojas, las cuales el mismo decidió probarlas para sentir el sabor y ver qué podría suceder tras la situación que vivió con los cuadrúpedos.
En ese momento Kaldi, se sintió extasiado y corriendo llegó al monasterio para mostrarle estas ramas y frutos a sus superiores. Allí los monjes hirvieron las ramas y sus frutos. En un par de minutos se sintieron despiertos y con energía. Inmediatamente el descubrimiento se convirtió en una pócima milagrosa que los mantenía despiertos para poder rezar más y estudiar a Dios.
Pero la historia no quedó allí, pues dos de los monjes que ocupaban altos cargos en este monasterio, Sciadi y Aydrus, quisieron ir personalmente al lugar donde estaba esta planta.
PUBLICIDAD
Antes de dirigirse al lugar, los religiosos dejaron estas ramas y algunos frutos cerca de una estufa para que lograran secarse, pues cuando los habían recolectado fue en medio de una fuerte lluvia.
Sciadi y Aydrus volvieron. Pero fue para rezar por horas. Lo que no sabían es que las ramas y frutos que estaban cerca de la estufa o fogón se estaban quemando. Más allá de la preocupación de llegar al sitio donde estaba el café, sintieron un agradable olor a tostado que invadía toda la sala. Con estos antecedentes, perfectamente se podría asegurar, que un descuido terminó con el nacimiento de la torrefacción del café.
Partió como una bebida religiosa, después fue un estimulante para los guerreros que debían ir empoderados y valientes a las batallas, y finalmente se convirtió en la bebida social impuesta por el mundo árabe.
En la actualidad, Brasil es el mayor productor de café a nivel mundial. Luego viene Vietnam, Colombia, Indonesia y Etiopía.