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Una encuesta realizada por Adimark reveló que el 41% de los chilenos consume comida rápida por lo menos una vez a la semana.
El estudio, realizado en las capitales regiones y ciudades con más de 100 mil habitantes, entre hombre y mujeres mayores de 15 años de todos los estratos sociales a 3.200 personas, mostró una caída respecto de último sondeo de 2013, cuando el porcentaje llegaba a 45%.
Son los hombres los que más comen este tipo de alimento con un 44% versus el 39% de las mujeres. Cabe destacar que en ambos casos, se observó un retroceso de 6 puntos porcentuales en ellos y de 2 puntos en ellas.
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Asimismo, la ingesta cayó en todos los tramos etáreos respecto de la encuesta de 2013, excepto en el segmento de 15 a 24 años, quienes además son los que más consumen comida chatarra con un 74%.
Por el otro lado, son los sectores C2 y C3 los que más comen con un 45% a diferencia del ABC1 donde la cifra es 10% menor. Un dato que llama la atención es que en el segmento de menores recursos (D) la ingesta se redujo un 7% respecto de 2013.
Pese a estos datos, al preguntarles cómo es su vida, el 59% considera que es “muy saludable” y solo el 11% considera que es “poco saludable”
Por ciudades, Puerto Montt y Los Ángeles lideran la ingesta con un 60%. Al contrario, las urbes donde se consume menor comida chatarra proporcionalmente Calama y Quilpué, con 34% y 33%, respectivamente.
Comida rápida vs. vida sociable
Otras cifras que llaman la atención en el estudio es que los que comen más comida rápida serían personas más sociables.
El sondeo da cuenta de que navegan más en Internet (60% versus el 40% que no consume de este tipo de alimentación), conversan más por teléfono (65% vs 55%), e invitan a sus amigos a la casa (36% vs 23%).