Mediante un comunicado, Minera Escondida anunció que está abierta al diálogo con los trabajadores en paro, y anunció que durante los primeros 30 días de huelga legal no realizará reemplazos.
Y agregó que “una huelga de estas características nunca es motivo de ganancia para nadie (…) Es por eso que manifestamos en el día de ayer, nuestra disposición a negociar todos los temas en controversia, sin condicionar ninguno y reunirnos todas las veces que sean necesarias para terminar esta huelga lo antes posible”.
El comunicado, está suscrito por el vicepresidente de Asuntos Corporativos de la cuprífera, Patricio Vilaplana, e invita a los 2.500 trabajadores del Sindicato N°1 a crear un nuevo contrato colectivo, de acuerdo a la realidad que presenta la compañía y el mercado.
Por su parte, Andrew McKenzie, controlador de BHP Global, propietaria de Minera Escondida afirmó que «preferiría que no tuviéramos huelga. Nuestra próxima fase de productividad y seguridad requiere la mayor flexibilidad de los trabajadores, un mayor empoderamiento, y que puedan tomar control para ser ellos más productivos».
Y precisó que «necesitamos un acuerdo que nos entregue eso en Escondida y en todo el mundo, si queremos mantener esta competitividad y productividad. La forma en que hacemos las cosas es usualmente con negociaciones y algunas veces algunos trabajadores se preparan para negociar cuando están en huelga, más que para hacerlo antes de ir a huelga. Trabajaremos en eso”.
