«Me sentí honrado de ser parte de la película», dice Javier Bardem sobre su trabajo en «Los piratas del Caribe: la venganza de Salazar». Se trata de la quinta parte de la popular franquicia cinematográfica que acaba de debutar en cines locales y tiene al ganador del Oscar como el gran villano de la nueva cinta protagonizada por Johnny Depp, quien nuevamente da vida al carismático pirata Jack Sparrow.
PUBLICIDAD
En la cinta, Bardem interpreta al Capitán Salazar, un español a cargo de una flota de barcos que tenía como gran misión erradicar a los piratas y que en este intento se convirtió en víctima de una terrible maldición. Todo esto, luego de enfrentarse a un joven Jack Sparrow. Por lo tanto, es la intención de equiparar las cosas lo que ayudaron al actor a desarrollar el personaje. «Tenía algunas imágenes de un toro herido, lleno de rabia y con una fuerte necesidad de vengarse. Pero también había que encontrar el humor en ello», explica sobre su caracterización.
Y tiene sentido lo que dice el actor, pues la franquicia tiene basa su éxito con el público tanto en la mitología sobre los piratas, las maldiciones y los fantasmas, como en la capacidad de entretener con imágenes espectaculares de peleas y hacer reír gracias a su variopinto elenco de personajes encabezados por Depp. Esta vez, aparte de Bardem, la cinta está marcada por el regreso de Orlando Bloom (Will Turner) y Keira Knightley (Elizaveth Swann), además del debut de Kaya Scoladario como la joven amante de las ciencias Carina Smyth y de Brenton Thwaites en el rol de Henry, el hijo de Will y Elizabeth. Cabe recordar que también hay un muy gracioso cameo de Sir Paul McCartney.
Pero, si bien esta historia tiene como principal finalidad entretener, el encarnar a este villano implica un nuevo desafío para él en lo profesional y, explica, una de las razones por las cuales se sintió atraído a este papel. «Hay un punto en la historia en que puedo sentirme identificado con él. Puedo entender su mentalidad. Trato de escapar lo más posible de una caracterización tipo blanco y negro. Por supuesto, es un villano, pero también podemos encontrar empatía por él. Podemos encontrar un modo de estar en el rol en que la gente se puede sentir relacionado de un modo u otro. Y ese es el reto».
Ya acerca del rodaje en sí, Bardem contó que compartió más tiempo en el set con Geoffrey Rush (Capitán Barbossa) que con Depp. «Trabajar con Geoffrey Rush siempre es un placer y un honor. Aún recuerdo el primer día en que vi ‘Shine’. Quedé deslumbrado». Es un actor fantástico y está muy involucrado en el trabajo. Es un actor muy comprometido y detallista que quiere hacer todo a la perfección. Fue muy gratificante para mi estar cerca de él y aprender de un actor tan increíble». A pesar de compartir menos con Depp, a quien ya conocía y quien trabajó con su esposa, Penélope Cruz, en la entrega anterior, dijo: «Johnny es un gran tipo, muy dulce y un actor fantástico. Simplemente llegas, dicen ‘acción’ y él está listo siempre. Para mí era difícil no ser sólo un espectador y mirar lo que él hace, porque lo hace tan bien».