Una nueva película de los creadores de «Río» está en cartelera. Se trata de la animación «Olé, el viaje de Ferdinand». La película producida por Blue Sky Studios y con animación digital realizada por 20th Century Fox Animation cuenta una historia que te encantará desde el primer momento. Ferdinand es un pequeño ternero criado en un rancho para toros de corridas en España.
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Su destino era convertirse en un fuerte toro que enfrentara a los más famosos toreros en las arenas de Madrid. Sin embargo, Ferdinand es diferente. Él no quiere pelear, no quiere agredir. Sus pequeños amigos toros que viven con él en el rancho sueñan con las corridas de toros y con verse grandes y fuertes como sus padres.
Sin embargo, nuestro protagonista prefiere cuidar de una bella y pequeña flor. Pese a que su padre es uno de los toros más imponentes del lugar, éste entiende a Ferdinand y trata de aconsejarlo.
Exponer las corridas de toros sin ser agresivos
Un día, el padre de Ferdinand es seleccionado por sobre los demás para ir a las arenas a enfrentar a un torero y Ferdinand no lo ve más. En este punto, hay que destacar que la manera en que está trabajado el guión de la película es extraordinario.
Sabiendo lo cruda que es la realidad de las corridas de toros, en la película todo está abordado con un lenguaje familiar muy suave. No se detalla la agresividad de las corridas, sólo se deja inferir entre líneas. Es una película que brinda más risas que preocupaciones.
Un giro inesperado
Y la historia continúa. Durante un traslado, Ferdinand se pierde y cae por un barranco. En esa instancia es rescatado por un padre y su hija. Al despertar, el pequeño ternero se encuentra en una granja bastante especial. Se trata de un criadero de flores.
Pasan los años y nuestro pequeño amigo se transforma en un gran toro. Criado entre flores y colores, y con la compañía de Nina quien lo quiere como un hermanito. Ferdinand se siente parte de esta familia.
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Un toro grande, con corazón de niño
Es un toro tranquilo y tierno, pese a su gran tamaño. Un día parten una exposición de flores, a la que anteriormente habían llevado a nuestro amigo. Pero por su nuevo gran tamaño y el temor que podría ocasionar, deciden dejarlo en casa.
Ferdinand de igual manera logra llegar al pueblo, buscando a Nina y provocando un alboroto que termina con él en manos de la polícia. Y lo llevaron de vuelta al rancho de toros.
Ahí comienza toda una gran aventura donde nuestro ahora gigantesco amigo toro de color negro se reencontrará con su pasado, con sus antiguos amigos y también conocerá nuevos personajes. Tratará de luchar contra su naturaleza y destino de toro español, para demostrarle al mundo entero que la violencia no es el camino.
Mostrar una realidad cruda, sin ser explícito
Esta es una película emotiva, pues habrá momentos donde te congelará el corazón y otros donde llorarás de la risa. Personajes como la cabra Lupe, que sin duda amarás, le dan a la película un toque de humor constante que te hacen olvidar a ratos que se está hablando de un deporte tan fuerte y agresivo como las corridas de toros.
En este sentido, la película logra abordar una realidad agresiva con un lenguaje cercano, en un producción donde no verás ni una sola gota de sangre, si no que sólo el color rojo impregnado en miles de pétalos de flores.
Cultura y entretención, de la mano de personajes únicos y graciosos. Es una historia de amistad, amor y tolerancia. Pero también con un mensaje animalista que, sin ser directo, te hace cuestionar el que este tipo de actividades se siga realizando.
Pese a aquello, expone a la vez el corazón de España y la pasión de dicha nación por sus tradiciones, sin demonizarlo nada, si no que exponiéndolo de manera equilibrada. Ver esta película es sin duda, un panorama imperdible para toda la familia. ¿Y por qué no decirlo? La historia sorprende más allá de lo que esperábamos.