Gente de Zona tenía a toda la Quinta Vergara bailando. Eran cerca de las tres de la madrugada y, a punta de sus hits, pero también de un gran carisma, el dúo compuesto por Randy Malcom y Alexander Delgado estaban armando una fiesta traída directamente desde Cuba, convirtiéndose en la primera gran sorpresa de esta edición del Festival de Viña del Mar.
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Pero una falla técnica los puso en aprietos. El micrófono de Delgado no funcionó y los cantantes debieron compartir el de Malcom. Un impasse que no detuvo al dúo, que sobrellevó todo el problema con muy buen ánimo. «Aplausos que este es un concierto en vivo», dijo Randy, mientras Alexander seguía la misma línea y le baja el perfil a lo sucedido.
No dejaron que nada frustrara su primera vez sobre la Quinta Vergara, una que soñaban de chico concretar. «Mi familia sabe que estoy cumpliendo el sueño de nuestra vida», había confesado Alexander unos minutos antes. Es por ello que hicieron lo que quisieron. Subieron a un niño a cantar, a la candidata a reina de CHV, Lisandra SilvaViña, la invitaron a bailar, dijeron que tenían el permiso de la alcaldesa de tocar todo lo que quisieran y cerrar su show con todo el jurado sobre el escenario.
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Antes, otro artista vivió complicaciones con su presentación. Jenny Cavallo se disponía a cerrar su exitosa rutina, cuando unas inesperadas pifias empezaron a escucharse desde la galería. La comediante tuvo que detener su show y hasta preguntó si querían que siguiera, asumiendo que eran para ella.
La intervención de Rafael Araneda y Carola de Moras aclaró la situación. Una personas se había desmayado y necesitaba asistencia. «Lo único que espero es que la persona que se desmayó esté bien. La invitaré a tomar once», dijo sobre la situación vivida en su conferencia de prensa. Un hecho fortuito que arruinó el cierre de Cavallo, quien fue premiada con la Gaviota de plata.
Un Luis Fonsi muy distinto fue el que se subió a abrir la segunda noche del Festival de Viña. Luego de un año de ser protagonista del éxito global de su canción «Despacito», el puertorriqueño presentó sobre la Quinta Vergara su nueva fórmula para hacer pop. Una que deja atrás las baladas y apuesta por un potente show en clave pop rock bailable en el que coexisten temas como «¿Quién te dijo eso?» y «Échame la culpa».
Una apuesta que Fonsi mostró muy bien trabajada, que sorprendió a todos los que estaban acostumbrados a sus shows antes de «Despacito», y que candidatea a que su presentación sea uno de las mejores de este Festival 2018.