La aventura perruna de Wes Anderson

Perros son los protagonistas de la nueva cinta del elogiado director Wes Anderson (“Vida acuática” (2004) y “Los excéntricos Tanembaum” (2001)) llamada “Isla de perros”, que se estrenó ayer en Chile. Una historia que transcurre en la ciudad inventada de Megasaki. En ella, una serie de enfermedades mortales empiezan a atacar a los humanos, quienes deciden trasladar a todos los perros a una isla de basuras.

“Tuve esta idea por algunos años, de que quería hacer una segunda película animada stop-motion. Quería hacer una que fuera sobre perros y pensé en un grupo de perros alfa, llamados Chief, Duke, Boss y King, que vivían en un basurero. Realmente no sé por qué pensé que era bueno, pero ésa era mi sensación”, cuenta Anderson, de dónde empezó la idea de este proyecto situado en Japón, pero grabada en Londres.

¿De dónde vienen estas influencias japonesas?

– Películas japonesas. Particularmente, cintas de los años 50 y 60. Akira Kurosawa es realmente nuestro maestro. Además, está Hayao Miyazaki y fuera del mundo del cine, están Hokusai e Hiroshige. Nuestras mejores inspiraciones son las películas de esos directores y las de esos artistas.

Atari es un dulce personaje central. ¿Cómo lo concebiste?

– Creo que, en cierto modo, está el Atari que escribimos y luego está el títere Atari. Para el que escribimos, teníamos una idea de un chico que estaba extremadamente decidido, desafiante, pero hablando suave y que, poco a poco, perdía su cabeza. Estuvo en un accidente de avión. Ha sufrido un trauma que creo que en una película animada, como la nuestra, se puede tratar un poco a la ligera. Pero luego encontramos a Koyu Rankin (el actor que presta su voz para Atari). El personaje tiene doce años en el guion, pero Koyu tenía ocho años. El títere que terminamos diseñando está, creo, inspirado en su actuación, realmente. Su voz afectó cada paso de lo que hicimos, desde el momento en que lo grabamos.

¿Cuánto trabajo implica el crear estos títeres héroe?

– En la película anterior que hice, “Fantastic Mr. Fox”, teníamos una compañía de títeres llamada Mackinnon y Saunders. Nos ayudaron con el proceso y aprendimos mucho de ellos. Andy Gent es el nombre del jefe de todo lo que tiene que ver con los títeres. En esta película, él fue quien supervisó todo, de principio a fin. Desde el diseño de las armaduras de cada títere a los globos oculares.

¿Cómo fue esa experiencia con tus colaboradores?

– Es genial tenerlos a todos juntos en la sala. Tuvimos a Bryan Cranston, Bill Murray, Edward Norton y Bob Balaban juntos, grabando sus partes. Lo que disfruté especialmente es que usas el ensayo. Puedes usar cualquier cosa que diga alguien, y lo editamos y trabajamos con él, lo animamos y lo usamos. Extrañamente, la espontaneidad es lo que más me gusta de las representaciones en animación stop-motion.