Que te llamen para ser rostro de una marca debería ser algo más que interesante. Aún más si es la primera vez que te consideran para ello y te prometen una importante suma de dinero. Pero para Pedro Ruminot, algo le parecía extraño. Así lo contó en su cuenta de Instagram, en la que relató la particular campaña publicitaria que lideraría.
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“Me llamaron para un comercial donde sería rostro de una marca de ropa. Primera vez que me pasaba y encontraba raro que me llamaran para algo así. Era harta plata igual. Millones”, escribió, para luego contar de qué se trataba realmente el ofrecimiento.
La idea, según cuenta Ruminot, era mostrar a «un moreno que se creía mino y el rubio del comercial se reía de él diciendo que era ‘mino’ poniendo gestos y caras de burla”. “Lo que se entendía de esta campaña era que los morenos eran feos y si se ponían la ropa de esta marca, su apariencia iba a cambiar”, expuso el esposo de Alison Mandel.
Todo esto, luego de realizar la prueba de vestuario para el comercial, sin haber leído el guión, ya que aún no llegaba al lugar. Una vez que lo leyó y entendió de lo que se trataba, decidió no ser parte de la publicidad. “Les dije que no, que no haría eso, que me parecía una falta de respeto”, explicó en su mensaje en Instagram.
“Les dije que no me importaba perder tanta plata, pero que la dignidad era más importante y no podía ser parte de algo así. No se si hice bien o debí aceptar la plata callado pero sentía que debía hacer la diferencia. Me sentí mal porque quizás debí ser más duro con ellos y no tan educado como lo fui para explicarles varias veces que estaban haciendo una campaña asquerosa y racista”, agregó, para luego final con el siguiente mensaje: “Métanse su plata por el orto amigos del comercial”.
