Un ejército de admiradores en impermeables y botas de lluvia resistieron pacientemente una tormenta la noche del jueves para poder reencontrarse con Shakira en México siete años después de su última visita al país.
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El concierto de la estrella colombiana en el Estadio Azteca, parte de su gira mundial “El Dorado”, estaba programado para las 8:30 pm, pero un intenso aguacero no permitió que comenzara sino hasta poco antes de las 10:00, y una vez empezado continuó lloviendo.
La pirotecnia entre la que salió Shakira fue como un rayo de sol para los más de 48.000 asistentes que inmediatamente comenzaron a bailar al son de “Estoy aquí”.
“Hoy es la primera noche de nuestra gira en Latinoamérica y estoy muy contenta de estar aquí en México”, dijo Shakira un par de canciones después. “Porque es cierto que este país también es mi casa”.
Shakira habló poco y mantuvo un ritmo incesante durante el espectáculo de hora y media en el que interpretó temas bailables como “Loba”, “Waka Waka”, “Loca” y “Suerte”, así como las baladas “Antología” y “Underneath Your Clothes”.
Pero sus poderosos duetos fueron un arma de doble filo, pues al no tener con ella a colaboradores como Maluma en “Chantaje” o Alejandro Sanz en “La tortura”, la sensación era un poco rara. Las partes de estos artistas sonaron en pistas pregrabadas mientras sus rostros se proyectaban en las pantallas gigantes del escenario. Una excepción “in absentia” fue “La bicicleta”, que pese a la falta de Carlos Vives puso a bailar a la multitud con su vallenato desesperado.
Definitivamente los mejores momentos de Shakira fueron cuando interpretó temas totalmente en vivo como “Hips Don’t Lie” e “Inevitable”. Y la pirotecnia, que continuó de principio a fin durante el concierto, quedó de maravilla para las enormes dimensiones del Azteca.
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El viernes Shakira ofrecerá su segundo concierto en la capital mexicana antes de viajar a Guadalajara para un recital el domingo y a Monterrey el martes para su cuarta presentación en México. Tras esto continuará por República Dominicana, Brasil, Argentina, Chile, Ecuador y Colombia.
El jueves la cantautora, que ya ha recorrido Europa y Norteamérica con “El Dorado”, se encontraba en el último puesto de la lista de Pollstar de las 20 giras más lucrativas del mundo, con una recaudación promedio de casi 1,5 millones de dólares por ciudad.