Fueron más de 15 mil las personas que este viernes repletaron el Movistar Arena para el concierto de Residente en la capital.
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Luego de ser teloneado por el rapero PJ Sin Suela, el boricua salió al escenario junto a su corista y seis músicos, quienes se encargaron de comenzar la esperada jornada con «Somos Anormales», perteneciente al proyecto homónimo del cantante.
Recordemos que en marzo de 2017 el otrora Calle 13 lanzó su primer disco en solitario, todo esto tras dos años de viajar por el mundo explorando su linaje genético. Aún así, los éxitos que compuso con la banda que lo llevó al estrellato no podían quedar afuera, por lo que tuvieron un lugar privilegiado en este encuentro.
De esta forma y a tono con su álbum «Residente», René Pérez Joglar inició su concierto en Santiago con el video de una célula roja latiendo como un corazón, hasta explotar y mezclarse con los guturales sonidos siberianos del primer tema escogido.
El también denominado “Hijo del cañaveral” continuó la noche con el «Baile de los pobres» y «El aguante», canciones con las que hizo estallar al público viudo de Calle 13.
Luego llegó la primera sorpresa de la noche, con los inconfundibles acordes de “El derecho de vivir en paz” de Víctor Jara y de “El gavilán” de Violeta Parra, los que dieron paso a «Desencuentro», tema que oficialmente canta junto a la francesa Soko, pero que en esta ocasión fue reemplazada por la corista de la banda.
Con su característica polera musculosa y pantalón de buzo, el músico de 40 años continuó al mando de la fiesta con “Calma pueblo” y “Pal’ Norte”, para luego regresar al disco que lo convocaba e interpretar «Dagombas en tamale», su oda a un grupo étnico perteneciente al norte de Ghana.
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Y es que el camaleónico rapero oriundo de Trujillo Alto no paró de saltar de lado a lado del escenario cuando llegó el turno de “Adentro”, “Atrévete” y “Cumbia de los aburridos”, trayendo a colación inolvidables hits de los ya extintos Calle 13.
Uno de los momentos más sublimes de la noche arribó junto a “Latinoamerica”, canción con la que Residente demostró una vez más ser un rapero consagrado, interpretando este “himno” para la región que, como era de esperar, fue ovacionado por sus versos que entrelazan críticas a la política y a la sociedad que habita el sur del continente.
Pasadas las 23:00 horas llegó el primer y único bis de la noche, espacio en que el ganador del Grammy Anglo 2018 completó el setlist con «Hijos del Cañaveral», «Sexo», «La vuelta al Mundo», «El futuro es nuestro», «No hay nadie como tú» y la irreverente «Vamos a portarnos mal».
Como no podía faltar, Residente entregó un mensaje al pueblo latino, visibilizando la crisis que también se vive en esta zona del continente.
En uno de los mejores momentos de su carrera, presentando un disco que posee una potente reflexión sobre la guerra, la pobreza, la discriminación y la diversidad, Residente remeció al público del Movistar Arena, quienes entre gritos, baile y ovaciones, disfrutaron de un concierto que duró dos horas y media, y que mezcló las más variadas rimas dentro de su repertorio.
Un concierto de Residente «es un abanico de diferentes sentimientos, pero todos tienen algo en común, y es que tiene mucha energía, una energía fuerte y la gente sale bien contenta y sudada”, reconoció el mismo rapero en una reciente entrevista realizada por Publimetro México.
Y sí, así lo demostró durante la primaveral noche de este viernes en Santiago.