El mes pasado, la estrella de «Juego de tronos», Emilia Clarke, reveló que había experimentado varios aneurismas cerebrales que comenzaron después de la primera temporada del programa. Su ex pareja en la serie y gran amigo en la vida real, Jason Momoa, habló sobre la experiencia y cómo ayudó a Emilia
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“Casi la perdimos la primera vez” dijo en una entrevista, visiblemente afectado.
En declaraciones al programa ET, Jason explicó: «Estoy muy triste porque casi la perdimos la primera vez. La quiero en pedazos, y ella está aquí y va a hacer grandes cosas con ella y enseñarle al mundo».
Continuó diciendo que él ha sabido de su enfermedad por «mucho tiempo», y agregó que está asombrado de la valentía de su amiga.
Él dijo: «He sido parte de toda esa situación durante mucho tiempo, por lo que hemos tenido muchos temores y hemos tratado de encontrar la manera correcta de salir de esto y ayudar. Creo que es hermoso. Ella es tan valiente en ayudar al mundo y tratar de crear conciencia».
Emilia logró mantener sus problemas de salud fuera del ojo público durante años, pero en un ensayo para el New Yorker reveló que había sido apresurada a la cirugía urgente en 2011 después de que le diagnosticaran una hemorragia subaracnoidea, un derrame cerebral donde el pronóstico es que un tercio de los pacientes pueden morir.
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Ella escribió: «Nunca había experimentado un miedo como ese, una sensación de fatalidad acercándose. Podía ver mi vida por delante, y no valía la pena vivirla. Soy un actor; necesito recordar mis frases. Ahora no puedo. No recuerdo mi nombre. En mis peores momentos, quise desconectar. Le pedí al personal médico que me dejara morir. Mi trabajo, todo mi sueño de lo que sería mi vida, centrado en el lenguaje, en la comunicación. Sin eso, yo estaba perdida».
La actriz se ha recuperado y se prepara para promocionar la última temporada de Juego de Tronos.