Hace poco más de siete años, Aurora (Illinois, EEUU) vivió uno de sus días más tristes. El viernes 20 de julio, durante el estreno de la película «The Dark Knight Rises», James Holmes realizó un ataque armado en un cine, el cual dejó doce muertos y otros cincuenta y nueve heridos. Todo porque, según afirmó la policía, el hombre de 24 años aseguró ser el Joker.
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Es por esto que los familiares de las víctimas del tiroteo masivo decidieron enviar una carta a Warner Bros. expresando su preocupación por la nueva película acerca del enemigo de Batman, que es protagonizada por Joaquín Phoenix.
En ella, aseguran que permanecen perseguidos por el «infierno y el dolor absoluto» del tiroteo en Aurora. «(El ataque), perpetrado por un individuo socialmente aislado que se sintió ‘perjudicado’ por la sociedad, ha cambiado el curso de nuestras vidas», dice la carta obtenida por EW.
Preocupación, no boicot
Sin embargo, el grupo de familiares no está pidiendo al estudio que detenga el lanzamiento de la película, o instando a un boicot, ya que «cuando supimos que Warner Bros. estaba lanzando una película llamada ‘Joker’ que presenta al personaje como protagonista con una historia de origen comprensiva, nos detuvo».
En cambio, le están pidiendo al estudio que realice una donación a grupos que ayudan a las víctimas de la violencia armada, así como «poner fin a las contribuciones políticas a los candidatos que toman dinero de la NRA y votan en contra de la reforma armamentista» y «usar su influencia política y aprovechar en el Congreso para cabildear activamente por la reforma de armas».
«Queremos dejar claro que apoyamos su derecho a la libertad de expresión», agrega la carta. “Pero como cualquiera que haya visto una película de cómic puede decir: Con un gran poder viene una gran responsabilidad. Es por eso que le pedimos que use su plataforma e influencia masivas para unirse a nosotros en nuestra lucha para construir comunidades más seguras… Mantener a todos seguros debe ser una prioridad corporativa para Warner Brothers», sentencia.