Javier Olivares puede estar más tranquilo. El comunicador chileno será deportado de Egipto luego de ser detenido en aquel país por sacar fotografías y filmar sin los permisos correspondiente.
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Según consigno T13, el periodista fue abordado por la policía en el balneario Sharm el sheij, al noreste de Egipto. Ahí, Olivares se encontraba caminando con su cámara de fotos y un trípode cuando lo acusaron de fotografiar a uniformados.
Tras su detención, fue trasladado a El Cairo, donde estuvo varias horas incomunicado. En horas de esta mañana, Javier Olivares subió un tweet a redes sociales, pero luego lo borró.
“Estoy raptado y detenido en Egipto por la Policia. Este es mi tercer día y solo ahora puedo tener unos minutos mi teléfono”, dijo. «El motivo es ser periodista y andar con mi cámara de fotos y trípode. Según ellos tomando fotos a policías, cosa que es falsa. No sé que podrá pasar”, sentenció en la publicación.
En los últimos minutos, se ha confirmado desde Cancillería que la familia del comunicador se contactó con Consulado de Chile en Egipto para requerir asistencia. A raíz de esto, estuvieron en permanente contacto con el padre de Javier Olivares, y una vez que se supo del lugar de detención, se contactó con él para conocer en qué condiciones estaba y el estado procesal de la detención.
Así, las autoridades egipcias ya han decidido deportarlo y el Cónsul se ha trasladado al aeropuerto para asistirlo en este proceso.
