Y es que con Aaron Carter todo puede ser. Y el último episodio polémico fue este miércoles, cuando realizaba una transmisión en directo por Youtube y se quedó dormido.
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Esto provocó que los fans que lo estaban viendo se preocuparon, pensando que estaba sufriendo una sobredosis. Así la policía llegó minutos después en su casa de California, tras recibir la llamada de alguien alertando el hecho.
Al no recibir respuesta, los efectivos entraron por la fuerza a la vivienda, pero sorpresa. Carter estaba durmiendo en su cama, y en perfecto estado de salud.
Tras realizarle una serie de preguntarse para cerciorarse de que no había consumido ninguna droga ni mostraba tendencias suicidas, los agentes se marcharon, pero todo apunta a que muy pronto tendrán noticias de Aaron en vista de que él ha confirmado que les enviará la factura de la reparación de su puerta principal.
En los últimos años, Carter ha pasado por rehabilitación debido a un problema de adicción a las drogas y por el juzgado para que un juez le confiscara muy a su pesar todas sus armas de fuego y el permiso para poseerlas.
Además, sus hermanos Nick y Angel solicitaron una orden de alejamiento en su contra tras alegar que podía suponer un peligro para sí mismo y para ellos. Recordemos que el cantante acusó a sus hermanos de violación y abuso sexual.