A comienzos de este año la familia real británica tuvo uno de los mayores golpes internos. El príncipe Harry y Meghan Markle decidieron dejar sus labores como parte de la realeza para intentar tener una vida lo más normal posible junto a su pequeño hijo Archie. Para lograrlo, incluso se instalaron en Los Angeles, Estados Unidos.
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Pero esta salida, tal como cada paso que dan los Windsor, sigue reglas especiales y está normada por por un histórico acuerdo entre ellos y la Reina Isabel II que les permite abandonar la primera línea de la familia real. Eso sí, los término del convenio se pueden revisar cada año y, según reporta The Sun, eso es juntamente lo que Harry y Meghan buscan hacer. Es decir, volverían a Inglaterra para renegociar su papel en la realeza.
Eso significa que la pareja debe ir a Londres ver los detalles de la extensión del pacto, que finalizará el 31 de marzo de 2021. Y el énfasis estaría puesto en que no quieren dejar completamente su posición en la realeza, sino que buscan mantener su libertad. Para ello, viajarían antes del 31 de marzo y estarían en Inglaterra al menos hasta el 21 de abril, fecha en que la reina Isabel celebrará su cumpleaños número 95.
Si bien la pandemia ha dificultado las cosas, Harry ya estaría preparando las negociaciones a través de videollamadas con el fin de mantener los patrocinios reales como African Parks y la fundación Invictus Games, sin tener que retomar sus vidas dedicadas 100% al servicio de sus deberes reales. Además, Hary tendría entre sus planes los títulos militares a los que debió renunciar cuando salió de la monarquía.