Cuando se está mal, sabemos que se intenta lo que sea, y así nos dejó claro Daniel Fuenzalida, quién confesó un extraño ritual que vivió en medio de su crisis con el alcohol y las drogas.
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Todo esto pasó en medio de una conversación seria, pero graciosa, que tuvieron los panelistas de Me Late Prime. Según lo que transcribieron desde Glamorama, la historia fue más o menos así.
Pamela Díaz: “¿Con el Pollo Valdivia?”
Daniel Fuenzalida: “¡Pero, por favor! Nada que ver. Yo una vez tuve un ritual, fui donde una machi a Nueva Imperial para hacer una limpieza”
Díaz: “¿Una limpieza de qué?”
Sergio Rojas: “Estaba súper mal por dentro. Acuérdate”
Fuenzalida: “Estaba mal. Me habían tirado mala onda, malas energías. Esto tiene que haber sido como el 2008”
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Díaz: “¿Y tú estabas bien?”
Fuenzalida: “No poh. Estaba arriba de la pelota. Entonces me llevan a esto, una sanación un fin de semana”
Díaz: “¿Quién te llevó?”
Fuenzalida: “Me llevaron y me tenía que quedar ahí. Y fui a Nueva Imperial. Me presentan a esta señora que me recibe. Me dice que duerma en un lugar y a eso de las 12 de la noche aparece, abre la puerta de su casa y me trae un pollo”
Díaz: “¿Cómo un pollo?”
Fuenzalida: “Un pollo vivo”
Díaz: “No, no, no”
Rojas ríe: “Si es verdad esto”
Díaz: “Pero un pollo…”
Fuenzalida: “Un pollo. Entonces me dice ‘tienes que dormir toda esta noche con este pollo’”
Díaz: “Espérate. ¿Y por qué tú aceptas eso?”
Fuenzalida: “Porque iba a un ritual”
Díaz: “¿Y qué te dice la señora?”
Fuenzalida: “La señora me dice ‘si te están tirando malas energías’, un ritual que es bien respetable, es del pueblo mapuche. Entonces me dice ‘si te están tirando malas energías, le va a llegar al pollo’. Yo duermo con este pollo y ahí fue bien difícil”
Díaz: “Ay no”
Fuenzalida: “Porque de 12 a 6 de la mañana tuve que aguantarme al pollo”
Díaz: “¿Cómo vas a dormir con un pollo abrazado? Es imposible”
Fuenzalida: “Y el pollo se me arrancaba”
Díaz: “Obvio poh”
Rojas: “Tenías que agarrarle el cogote al pollo”
Daniel Fuenzalida: “Yo agarré a este pollo y me lo puse…”
Díaz: “Me estás webiando… Perdón pipol, pero esto es mentira”
Rojas: “¿De dónde agarraste al pollo?”
Fuenzalida: “Agarré al pollo del cogote”
Díaz: “¿Tú estabas sano?”
Fuenzalida: “Si estaba sano. Y agarré al pollo del cogote, lo tiré más abajo, entonces me puse con la sábana a pelear con el pollo (ríe)”
Díaz: “No… Vos estás enfermo mental”
Fuenzalida: “Y el pollo se me trataba de escapar por los pies y yo le pegaba un poco al pollo para que no se fuera. Y así estuve seis horas aguantando al pollo”
Díaz “¿Y de qué te sirvió?”
Fuenzalida: “Después se lo tenía que pasar a la señora”
Díaz: “¿Para qué?”
Daniel Fuenzalida: “Ella hizo un ritual con el pollo. Entonces después casi ya nos hicimos amigos. El pollo entre que estaba medio atontado nos hicimos amigos. Después vino todo un ritual y todo lo que hacen”
Rojas: “¿Ahí le cortaron la cabeza?”
Fuenzalida: “Hay un ritual. Se hace en el sur bastante, en Temuco, Nueva Imperial, y dormí con ese pollo”
Díaz: “¿Y tú estás bien?”
Fuenzalida: “Fue hace doce años”
Díaz: “¿Y de qué te sirvió? Porque hay gente bien ignorante que puede creer que eso es verdad”
Rojas: “Sí le sirvió”
Fuenzalida: “Es verdad”
Díaz: “¿Pero de qué te sirvió? Es que hay gente que cree en eso. Di la verdad, porque puede haber gente que está pasando por lo mismo. Y eso es mentira…”
Fuenzalida: “Vamos a hablar con la verdad. Yo tengo de toda la vida una nana que me vio nacer y estaba muy preocupada por mi situación de alcohol y drogas en mi vida. Y ella, en su creencia, pensó que alguien me había tirado malas energías. Yo en ese tiempo probé todo para poder recuperarme. Iba a unos sitios, recaía. Ahora empiezo a hablar bien en serio.
“Y fui a este ritual porque yo probé todo. Y mi nana, que es la Luz, que le mando un besito, me dice ‘pruebe con esto’. Ella es de allá, es de Temuco, y yo fui para allá. Y yo aguanté todos estos rituales, no solamente del pollo, que pasa a ser una anécdota, que tiene que ver con estar un fin de semana ahí haciendo algunos rituales. Había unas personas que incluso estaban enfermas de cáncer y que también tenían esta creencia.
“Y yo duermo con el pollo. Se hacen otros rituales. Al otro día se hace una sanación con agua ardiente y unas hojas especiales del pueblo mapuche y pasé todo ese fin de semana. Volví y a la semana empecé mi tratamiento con el alcohol y las drogas. Estuve dos años tratándome. No sé si es coincidencia o no, pero de ahí en adelante nunca más tomé. Y me rehabilité también del lado cognitivo, con terapia y todo. Pero coincidió que una o dos semanas antes había ido a este ritual. Uno puede creer o no. Coincidencia o no coincidencia”
Díaz: “¿Antes ibas a terapia y no…?”
Daniel Fuenzalida: “No pasaba nada. Recaía y me iba mal”
Díaz: “Fuiste al siquiatra, sicólogo, todo eso”
Fuenzalida: “Fui al siquiatra, sicólogo, terapias particulares, de grupo, donde quedaba limpio como tres meses y recaía. Y después esto coincidió y me sirvió”.