«Fue una invitación que se terminó convirtiendo en uno de los regalos más maravillosos de la vida», dice Juan Ignacio «Chascas» Valenzuela vía Zoom desde Estados Unidos. El guionista habla del proceso tras «¿Quién mató a Sara?», el thriller de su autoría que debuta este miércoles 24 en Netflix.
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El también autor de «La familia de al lado» y «Dama y obrero», cuenta que el trabajo en esta producción duró dos años -«más años que los que tiene mi hija», agrega- y que todo partió tras una llamada del director de contenidos originales para Latinoamérica de Netflix. Roberto Stopello, quien fue su jefe en Telemundo, lo contactó para saber si le interesaba proponer ideas para una serie. «¡Y a mí basta que me digan eso para ir a sentarme a mi computadora a escribir!», dice con un entusiasmo envidiable.
El resultado de ese trabajo es «¿Quién mató a Sara?», la serie grabada en México y que cuenta la historia de Alex (Manolo Cardona), un hombre que acaba de salir de la cárcel acusado de matar a su hermana Sara (Ximena Lamadrid), un crimen que no cometió. Como es de esperarse, Alex busca vengarse de Rodolfo Lazcano (Alejandro Nones), quien, cree, es el verdadero responsable. El problema es que en medio del proceso para hacer caer a Lazcano, este hombre lleno de rencor parte una relación sentimental con Elisa (Carolina Miranda), hija menor de su enemigo.
Expectativas
Valenzuela lanzó su primera teleserie hace ya 16 años: «Amor a domicilio» en Canal 13. Desde entonces, ha pasado por TVN y Telemundo, además de publicar novelas. Pero este es un paso enorme con un mercado global. Y él lo sabe.
«Estoy con el mismo nervio, entusiasmo, angustia, ansiedad que tenía cuando lancé la primera telenovela que hice en mi vida, hace un millón de años. Porque tenía la certeza… no, tenía la intuición de que eso me iba a cambiar la vida de alguna manera. No sabía por qué, cuando hice la primera telenovela, que fue ‘Amor a domicilio’. Y ahora estoy reviviendo esos mismos sentimientos», dice.
El guionista sigue explicando lo que este debut significa: «Porque, claro, yo sé que ‘Quién mató a Sara’, independiente de lo que pase con la serie en este mundo globalizado, para mí es un hito fundamental en mi vida. Nunca había escrito algo con estos alcances, con este nivel de producción, con este nivel de exposición y con este nivel de disciplina. Porque son 10 capítulos trabajados en dos años.
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Leones y no gatos
«Porque esto es steaming, gocé de la libertad más absoluta. Una de las cosas que valoro es el valor que Netflix le da al escritor. Para mí eso es algo nuevo y bastante impresionante», dice el también escritor por su trabajo con el gigante de streaming, donde descubrió que se le da respeto a la historia.
«El valor del escritor es muy poderoso», dice y agrega: «Todo se estructura en torno a la historia. Es la historia la que manda. No es uno el que dice ‘hace falta un elefante en esa escena, pero vamos a cambiarlo por un gatito porque es más fácil hacerlo así’. Si hace falta el elefante en la escena, el elefante va a estar. Porque la escena lo está pidiendo».
Y todo esto no sólo le permitió concentrarse en lo que quería contar, sino que trajo una enseñanza. «Para mí eso fue una novedad muy grande, y descubrí de esa manera que cuando se le da el respeto a la historia, es muy difícil equivocarse, es muy difícil meter las patas, es muy difícil que algo no quede a la altura».