A Florida, Estados Unidos, viajó Martín Cárcamo, para entrevistar a Mauricio Israel en «De tú a tú».
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Antes de empezar la conversación, Martín Cárcamo le aclara dos cosas: “no vengo a lavarte la imagen, porque no tiene ningún sentido y no está dentro de mi foco, pero tampoco te vengo a destruir. Vengo a conversar”.
La primera pregunta se relaciona con su salud, luego de que Mauricio Israel haya contraído covid. Dice que se contagió en el aeropuerto de Miami, “lo pasé mal, empecé a sentir mareos, dolor de cabeza, un poco de fiebre, cuando me dieron el resultado yo ya sabía que tenía covid. Hubo días en que yo no me podía mover, el dolor muscular, el cansancio, yo quedé con fatiga crónica porque las secuelas que te deja el covid son horribles. Hasta el día de hoy no me recupero 100%”.
Su salida de Chile y las deudas
Hoy por hoy, Mauricio Israel se dedica al corretaje de propiedades y lleva más de una década viviendo en Miami, Estados Unidos. Admite que ganó mucho dinero por su trabajo en la televisión y que su momento peak fue cuando estaba en Mega conduciendo el programa de la mañana. Dice que nunca fue una persona que ganara mucho dinero pero que empezó a comprar propiedades con préstamos bancarios y que estaba empezando a formar un capital cuando vino su quiebre económico.
“A mí me pilla la rueda cuando estuve 11 meses sin cobrar un peso. Me congelaron mis pagos porque supuestamente había sub declarado el IVA , cosa que no es verdad, pero en definitiva me tuvieron bloqueado 11 meses y tú caes como dominó y te empiezas a endeudar en el mercado informal”, cuenta Israel quien tuvo que salir de su casa porque la remataron.
Y agrega, “no tenía ninguna posibilidad de salvarme, tenía una deuda que era imposible de pagar”.
“¿Tú le pediste plata a amigos?”, pregunta Martín. Mauricio Israel responde: “amigos, como decirle a alguien ‘¿oye préstame 500 lucas?’, no. Salvo lo que dice Rodrigo Herrera que yo creo que sí, efectivamente en algún minuto él me tiene que haber dado algo, no recuerdo el monto –tampoco lo discutí- y yo quise devolvérselo siempre. Él me avaluó en un auto, esa es una historia cierta, pero salieron muchas cosas como que le debía plata al jardinero, no, nada de eso es cierto”.
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Dice que por sus deudas económicas lo sacaron de pantalla y que lo echaron de Mega al día siguiente de la muerte de Ricardo Claro. Luego intentó hacer un programa en La Red el cual dice que no tuvo éxito, “y como no me estaba yendo muy bien en La Red, no tenía de donde generar las lucas para poder devolverle a la gente la plata, entonces tuve que recurrir a mi familia”.
Tras analizar la situación con su familia y un abogado, se tomó la decisión que saliera del país por un tiempo para poder arreglar sus problemas. “Que me fuera por un tiempo. Yo estaba muy mal psicológicamente, anímicamente, físicamente, ya no aguantaba más, porque cuando estás con un nivel así de problemas colapsas en todo sentido. Y la verdad es que fue una mala decisión que yo me hubiera ido”, confiesa.
Nada de relación con su hijo mayor
Mauricio Israel cuenta que su hijo mayor, Alan (34), estaba muy dolido con lo que él estaba pasando en relación a sus deudas económicas, dice que su hijo trató de advertirle lo que se venía pero que él no lo escuchó. “Yo sí te puedo contar, y con mucho dolor, que mi hijo hace cuatro años que no me habla. Y la gota que rebalsó el vaso fue la demanda que puso Marisol a mis papás por el pago de pensión alimenticia. Pensión alimenticia que nunca se dejó de pagar”, confiesa Israel.
Cuenta que Marisol demandó a sus padres y que Alan lo llevó al tribunal pero cuando llegaron se enteraron de que Marisol había desistido de la causa. “Mi hijo desde ese día me dijo, ‘yo no’… él sintió que yo pude haber evitado que eso llegara pero no tenía cómo evitarlo (…) Alan está muy molesto, muy enojado, a mí me duele no tener contacto con él. Tengo ese dolor permanente en el alma de que mi hijo está enojado conmigo y la verdad es que tiene toda la razón. Yo sé que le he causado dolor a mis hijos, a mis sobrinos, tengo un sobrino que físicamente se parece mucho a mí y sufre mucho bullying, mi hija sufrió bullying también”.
Y agrega, “él sentía que yo estaba desordenado, que yo estaba pateando la pelota, que en un momento determinado yo estaba tapando los hoyos. Entonces no le quería contar mucho a él, no lo quería involucrar. Y el sentía que yo no estaba siendo ordenado, que la plata no me alcanzaba, y era verdad que no me alcanzaba, pero yo tampoco fui lo suficientemente honesto con él en ese minuto de contarle lo que me estaba pasando porque no le había contado a nadie”.
“Yo… Alansito yo te echo mucho de menos, y te necesito mucho y sobre todo en esta etapa de mi vida. Y yo sé que soy egoísta al pedírtelo pero no tienes idea cómo te extraño. Él no sabe, no logra dimensionar lo que él me hace falta”, dijo Israel.