Una insospechada e inesperada anécdota, que sorprendió a su compañero de animación, Julio César Rodríguez, contó este viernes Monserrat Álvarez en el inicio del programa «Contigo en la mañana».
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Mientras comentaban detalles de la detención que Carabineros realizó a 28 personas que estuvieron anoche en un club nocturno de Coquimbo infringiendo las medidas sanitarias de restricciones por cuarentena, la periodista reveló que ella había ido a un night club ubicado en el centro de Santiago. Hasta ahí todo normal, salvo cuando dio un giro inesperado en su relato para agregar que en dicho local sacó «esa bailarina que todas llevamos dentro. Fui poseída por el espíritu de bailarina de night club» para subirse al escenario y hacer una performance en el caño.
En la medida que avanzaba en su relato, Rodríguez más le daba cuerda a su colega para que entregara detalles de la experiencia que, según Álvarez, la realizó junto a «Carlitos».
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«Lo pasamos (…), eran las 7 de la tarde y ahí aparecieron todas las chiquillas que trabajaban en el night club. Éramos Carlitos, yo y cinco chiquillas conversando», contó Monserrat, mientras Julio César le decía «¿por qué no me llamaste?».
A medida que contaba su experiencia, la periodista reveló mque fue en ese momento en que se subió al escenario y se desató en un baile, para ella «inolvidable».
«Fue muy entretenido, porque fue antes que llegaran los clientes y ahí yo me pude liberar y bailar en el caño y estuvimos conversando mucho rato con las chiquillas y fue muy entretenido», prosiguió Monserrat, quien incluso mostró en pantalla un video donde se le ve jugando con el caño.
No conforme con relatar dicha experiencia, la conductora del matinal siguió dando muestra de su vasto conocimiento en locales nocturnos, preguntándole a Julio César si aún seguía en funcionamiento el local «Nautilus» de la plaza Baquedano y si su colega había ido al «Tap Room» del paseo Bulnes, algo que el periodista no pudo responder ya que, según él, «no conozco mucho de esos locales, jajá».
Para finalizar el relato, fue la misma conductora quien leyó un mensaje que le habría escrito una de las bailarinas con las que habló en esa ocasión, señalando que la reconocieron cuando ella habló. «Último minuto, escribió la chica. ‘Ese local era el Lido, de Mac Iver. La conocí y me acerqué, yo fui la niña que me senté y habló con ella, saludos para ella. Yo compartí con ella, porque siempre la veía en la mañana’ ¿Viste? Saludos a todas las chiquillas», cerró su jocoso relato.
