En cuanto debutó en Netflix en 2018, «Luis Miguel, la serie», se convirtió en un hit. Y no fue nada raro, porque la producción cuenta con numerosas características para convertirse en una favorita de la audiencia. Un personaje popular y reconocido por su talento como Luis Miguel y canciones conocidas por distintas generaciones. Todo eso condimentado con dramas familiares (incluida una desaparición), desventuras al por mayor, quiebres amorosos y terribles villanos sin una pizca de corazón.
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Con tantos ingredientes llamativos, no es extraño que el Sol de México cobrara una millonada por permitir que Netflix llevara a la pantalla la historia de su vida. Y es por esto que el músico se quedó con nada menos que 5 millones de dólares por la primera temporada de la serie protagonizada por el actor y cantante Diego Boneta.
Y luego de que el primer ciclo, de 13 capítulos, se convirtiera en un éxito, la voz tras «Hasta que me olvides» se pudo dar el lujo de pedir un aumento. Pero no se trató de un pequeño monto. De hecho, según reporta el medio Infobae, el cantante consiguió la friolera de 15 millones de dólares por la segunda temporada. Es decir, ¡triplicó sus ganancias!
Pero Luis Miguel no ha sido el único beneficiado. Porque Diego Boneta, quien en la segunda temporada se convirtió en productor ejecutivo de la serie de Netflix, también aumentó lo recibido. Eso significa que pasó a de recibir entre un estimado de 100 a 175 mil dólares por episodio, a sumar sus honorario tras las cámaras.
En todo caso, Boneta no tiene mayores problemas de dinero. Además de ser estrella de TV y la música desde que era niño, el mexicano tiene varios restaurantes de la cadena Dieguito, el hambrientito. Y, claro, cuenta con contratos con marcas y participación en lucrativos proyectos inmobiliarios. Su fortuna se calcula en 145 millones de dólares.
Y atención, que aún queda una tercera y última temporada.
