Julio César Rodríguez se encontró durante la mañana de este jueves 22 con una inesperada situación en el matinal de Chilevisión. Mientras hablaba a la alcaldesa de Ñuñoa, Emilia Ríos, sobre la falta de vacunas Pfizer, una vecina interrumpió a uno de los intervinientes del despacho para quejarse porque nadie venía a rescatar un gato que pasó toda la noche arriba de un árbol.
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Esto era porque Juan Pablo Queraltó, el reportero de Contigo en la mañana, estaba en el vacunatorio instalado en el Polideportivo de Ñuñoa. Este queda justo frente a la Villa Los Presidentes. De ahí apareció la desesperada vecina.
Entonces, mientras la alcaldesa todavía seguía en contacto, Julio César dijo que esas cosas las tenían que ver los bomberos. “Estamos llamando a Gabriel Boric para que se suba al árbol”, dijo primero el conductor de Contigo en la Mañana en Chilevisión. “Hemos sacado como diez gatitos y los que los sacan son los bomberos. Tienen voluntad. Lo sacan altiro. Vamos a pedir a nuestro amigo (Marco Antonio) Cumsille a ver si pega un telefonazo”, dijo.
Todo esto mientras la alcaldesa Ríos seguía en contacto. La vecina aprovechó que el periodista Juan Pablo Queraltó estaba en un vacunatorio de la comuna para llegar a pedirle ayuda. Ahí le dijo que el gato estaba en un árbol, a menos de una cuadra de donde ellos estaban en ese momento. “Yo llamaría a Boric”, insistió Julio César. Pero luego, cuando llegaron al lugar y vio el árbol, varió de idea. “Me retracto de lo de Boric. Este árbol está más complejo”, dijo.
“Ya que no hay vacuna, salvemos al gato, entonces. ¿Qué va a hacer carabineros”, dijo cuando vio a la policía en el lugar. “¿Van a tirar una cuerda? ¿Le van a sacar un parte?”, añadió. Luego se mostró incrédulo cuando le dijeron que el animal se llama Gato. Entremedio la alcaldesa dijo que estaban haciendo las gestiones para rescatar al animal desde el árbol.
Al rato llegó un carro de la Segunda Compañía de Bomberos de Ñuñoa. “El gatito tiene que estar nervioso, porque lleva como trece horas ahí. ¿Qué pasó con el gatito? Estamos nerviosos”, se preguntó cuando le dijeron que una vez que el bombero lo sacó del árbol el felino se soltó de sus brazos y escapó por los patios de la Villa Los Presidentes hasta su casa.