Puerta a puerta y ofreciendo pan hecho con sus propias manos. Así fue como empezó a empoderarse como emprendedor Patricio Strahovsky. El actor y comunicador el año pasado, en plena pandemia, decidió hacer pan de molde casero a sus vecinos. Luego, su hija le hizo el Instagram @lapanaderiadepapa, donde promociona sus creaciones, al igual que en su cuenta personal @patostrahovsky.
Pato cuenta a Esfuerzo Pyme y Publimetro que adquirió sus primeras clases en este arte culinario cuando era un niño. «Tenía tíos en el campo. Yo viví mucho allá y también iba a ayudar, a trabajar. En una de las familias de este campo estaba la señora Helena a quien yo veía siempre hacer pan. Una vez le pregunté, cuando yo tenía 10 años: ‘¿Usted cree que yo podría aprender?’ Ella me respondió: ‘Pero claro mijito, lógico, yo le enseño’. Ahí empecé a ayudarla. A veces me dejaba terminar un pan. Y así fui aprendiendo».
La historia sigue con el actor ya adulto cocinando de vez en cuando y como hobby. El clásico bocado para sus cercanos, los cuales siempre le celebraban la buena mano.
– ¿En qué momento decides vender lo que era tu afición?
– Cuando vino la pandemia me dije: “Si los locales no están abiertos, no se puede salir, voy hacer pan”. Volví a recordar a la señora Helena, mis tiempos de niño, cómo se hacía el pan, cómo se amasaba. Empecé a aplicar ese mecanismo y me resultó fantástico.
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Hacer pan casero
– ¿Y quiénes fueron tus primeros clientes?
– Como vivo en un condominio, empecé a golpear todas las puertas. Les decía a los vecinos: «Una de mis ondas es que sé hacer pan». Me respondían: «No te puedo creer…». Era cómo distinto, que un actor llegara hasta la puerta de sus casas y les ofreciera.
– ¿Cómo te sentiste vendiendo puerta a puerta?
– Sentí una alegría inmensa de poder entregar algo intrínseco de nosotros los seres humanos, que es comer pan, porque lo hacemos todos los días. Podría haber sido vergonzoso para mí, siendo actor, con muchos años de trayectoria. Pero eso jamás se me ocurrió pensarlo. Soy una persona afortunada y agradecido de mi aprendizaje.
– ¿Cuántos panes de molde sacas por horneada?
– Caben sólo dos. Una vez metí tres y me quedaron horribles. Entonces, primero entregué pan en mi condominio y luego me empezaron a pedir de otras partes y creé una clientela más grande.
Clientela
-¡Qué bueno! ¡Creció la clientela!
– Igual me empezó a complicar, porque lo hago en mi casa, con un horno normal, donde no cabe mucho.
– ¿Solucionaste ese tema?
– Sigo usando el mismo horno, pero ahora sólo cocino dos moldes y un sólo día a la semana. Tengo una clientela muy acotada. Al inicio hacía pan todos los días, hasta el sábado, sólo descansaba el domingo. Después de a poco bajé el volumen, porque no me daba el tiempo. En cocer me demoro 40 minutos, entonces, era estar todo el día trabajando eso… No me podía hacer pedazos.
– ¿Preferiste producir menos?
– Fue el momento de empezar a seleccionar a mis clientes y ellos a mí. Eliminé los que no eran tan constantes. La cosa se fue decantando sola y ahora tengo mis clientes fijos. Con todo eso, logré hoy dedicarme sólo el viernes para hornear.
– ¿Qué variedades de pan tienes?
– El pan blanco, el integral, con distintos tipos de semillas (chía, linaza, etcétera) y con aceitunas negras, verdes o mixto. El pan con aceitunas le gusta mucho a la gente.