En el año 1997, Bandai lanzó un juguete que marcó la niñez de muchos: el Tamagotchi. Se trataba de un pequeño dispositivo electrónico que contenía una mascota virtual. Inicialmente era un huevo, el cual debías cuidar hasta que se revelara tu criatura. Luego, ese pequeño animal virtual dependía completamente de tus cuidados: alimentación, remedios, cariño.
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El dispositivo era de plástico con llamativos colores en su exterior. Como los diseños eran varios, la tendencia era coleccionarlos. Esto a pesar de la dependencia que generaban: tu Tamagotchi podía enfermar o incluso «morir» sin tus cuidados. A través de tres botones tenías acceso a las funciones para interactuar con él. Tranquilos, tenía un botón «reset», para que volvieras a empezar el duro camino de criar a tu mascota.
Niños con bolsillo adulto
Este 2017 se cumplieron 20 años desde la salida al mercado de esta particular mascota. Los niños de los 90’s, hoy los adultos jóvenes de esta época, recuerdan con anhelo al particular juguete que fue parte de su niñez como los Power Wheels, Furby y tantos otros.
En el último año, la tendencia de lo retro ha cobrado fuerza, encontrando en los adultos jóvenes un consumidor con poder adquisitivo, dispuesto a comprar juguetes para ellos, a pesar de ya ser adultos. Es por eso que propuestas como los Pop (figuras coleccionables de series) o la NES Classic (una re edición de la Nintendo original), han sido tan exitosas.
El regreso
De momento, la versión 2.0 de este particular amiguito sólo está disponible en Japón. Bandas lanzó esta edición para celebrar el 20 aniversario del original. El formato ha cambiado un poco, pues el nuevo Tamagotchi es más pequeño que el original, pero los diseños exteriores se han respetado. La pantalla sigue siendo de tinta y sin colores y los ocho símbolos repartidos por encima y por debajo para saber cuál es el estado de la criatura a la que toca cuidar siguen siendo exactamente los mismos. Es sin duda un viaje a la nostalgia.
Las primeras unidades de este nuevo Tamagotchi se vendieron rápidamente, gracias en parte a su atractivo precio, cercano a los 9.000 pesos chilenos (1350 yenes), y ya están agotados. Aún no se confirma su lanzamiento en el resto del mundo, pero medios especializados de Japón plantean que, dada la moda de recuperar viejas consolas, juguetes y hacer sus versiones «nostálgicas» sería muy extraño que no se relanzara para el resto del mundo dentro de este año. Actualmente es fácil encontrar otras versiones del particular juguete en Ebay o Amazon, incluso algunos «jamás abiertos» que datan de la década de 1990.
