El Aeropuerto Comodoro Arturo Merino Benítez de Santiago cuenta por fin con un asistente robótico. Su nombre es Leo. Esta semana fue presentado junto con una exposición sobre la próxima generación en tecnología aplicada al primer proceso al arribo a un terminal aéreo.
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¿Qué hace Leo?
Leo, no sólo gestiona el equipaje, sino que también es un robot autónomo y auto-propulsor que cuida las maletas de los pasajeros. Esto quiere decir que podrás documentar y pesar. También servirá para dejar las maletas «mientras tanto» con sistemas de seguridad. Se trata de un ejemplo de cómo la robótica puede ser utilizada por líneas aéreas y aeropuertos alrededor del mundo para mejorar la gestión del equipaje.
El simpático asistente traído por SITA, proveedor global de IT para el transporte aéreo, mezclará entretenimiento, tecnología e innovación con su servicio. “Somos una compañía innovadora que entiende que el proceso de volar debe ser cada vez más autónomo (…) En ese sentido explorar el potencial de la robótica generaría un impacto en el modo de viaje y este robot es una buena iniciativa para la gestión del equipaje”, afirmó Gonzalo Trucco, gerente de aeropuertos de LATAM Airlines.
Nuevos desafíos
Desde la administración misma del aeropuerto también están contentos con la incorporación de este simpático amigo. Nicolas Claude, gerente general de Nuevo Pudahuel, indicó que “como concesionario del aeropuerto Comodoro Arturo Merino Benítez (AMB), estamos construyendo el nuevo terminal internacional 2020, que aumentará la capacidad anual a más de 30 millones. Este cambio no sólo refuerza a los operadores actuales, sino que también nos permite invitar a nuevas aerolíneas».
Cabe destacar que en un año y medio han arribado 6 nuevas al aeropuerto AMB y se esperan más. Dentro de este marco, avances tecnológicos como el pequeño Leo permitirán una mejor experiencia para los pasajeros.
Otros robo-amigos
Leo fue desarrollado por SITA Lab, un grupo de investigación tecnológica estratégica cuyo rol consiste en estimular la innovación tecnológica en la industria del transporte aéreo.
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Desde la inteligencia artificial hasta la Internet de las cosas, la tecnología de cadena de bloques y la biométrica, SITA Lab ha ayudado a crear muchas herramientas pioneras para los viajes aéreos, desde el primer control de salidas mediante el uso de biométrica facial hasta el empleo de máquinas inteligentes tales como Kate, nuestro el quiosco autónomo de documentación de embarque que ya muchos han utilizado.