La aracnofobia es el asco o temor irracional a las arañas y si bien hay personas que no le temen a este tipo de artrópodos, han debido enfrentar experiencias extremas con ellos que los dejan marcados de por vida.
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Y nada más extremo que ser “secuestrado” por una araña gigante y peluda al interior de un auto, tal como le ocurrió a Bianca Merrick en Australia.
La mujer, según reproduce el diario de EEUU New York Post, regresaba a su casa por la autopista cuando de manera repentina notó a su compañero de viaje, una araña de al menos 30 centímetros, a unos metros de su cabeza.
“Miré hacia arriba y ahí estaba mirándome fijamente”, dijo Bianca quien paralizada por el medio solo siguió manejando su vehículo sin realizar ningún movimiento brusco.
La mujer relató que pensó en detener su viaje, pero al no saber “cómo iba a sacar la araña del vehículo finalmente decidió seguir manejando y pensar que no estaba ahí”.
“Fueron los 20 minutos más largos de mi vida” replicó la mujer, quien una vez en su destino se deslizó suavemente fuera del auto, dejando encerrada a la araña.
Sobre el destino de su acompañante dijo que la mañana siguiente armada con un palo de escoba y un insecticida la buscó para enfrentarla pero el arácnido había desaparecido.
