Hay gestos que simplemente te alegran el día porque muestran lo más bondadoso del ser humano.
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En México, el actuar de una enfermera se ganó el cariño de todo el mundo por la increíble preocupación por la salud de sus pacientes que incluso la llevó a “dejar de lado” uno de los días más felices de su vida.
Yasmín Domínguez contrajo matrimonio y estaba en la fiesta junto a familiares y amigos cuando recibió un llamado.
Tras hablar unos minutos, la mujer se dirigió a todos los invitados y les pidió disculpas porque debía ausentarse por un rato.
Yasmín no lo dudó y partió con vestido de novia y todo a la casa de un paciente que necesitaba que le inyectaran unos medicamentos.
La mujer regresó a la fiesta, pero su maravilloso acto no podía quedar en las sombras, fue compartido por Facebook y su gesto se llenó de alabanzas. Simplemente espectacular.
