Un llamado al 911 desató un amplió operativo policial en Mendoza que hasta el momento arroja más dudas que certezas tras la muerte de un joven de 34 años.
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Antonio Zabala Charrón estaba sin vida en un céntrico departamento y fue encontrado por el arrendatario que le había alquilado el lugar el viernes, indica Diario Uno.
El joven debía dejar el inmueble a las 14.30 horas, y como ya eran las 15.45 el sujeto fue a “sacarlo”, cuando vio por la ventana que se encontraba tirado en la cama y no se movía.
Luego de varios gritos y como nunca respondió llamó a los uniformados e ingresaron al departamento.
Ahí estaba el cuerpo de Zabala sobre la cama, atado de manos y pies, con una bolsa en la cabeza y ropa interior de hombre en la boca, asegura Infobae.
De inmediato se empezó a trabajar en la teoría del homicidio, pero las evidencias comenzaron a generar dudas.
El cuerpo no tenía lesiones, las ataduras estaban sueltas y además había varias cartas escritas por el fallecido.
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También en su Facebook, Antonio había publicado una foto con el texto “gracias a cada uno de ustedes. Amo mi familia y mis amigos y compañers”.
Por ahora, tanto la policía como la fiscal no descartan ninguna hipótesis y se caratuló la investigación como «averiguación muerte”.