Un joven de 14 años que tenía cerca de 12 serpientes como mascotas murió luego de ser mordido por una cobra y no recibir una tratamiento médico oportuno.
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El adolescente indonesio había compartido una foto en un grupo de WhatsApp luego de bañar a la serpiente.
Poco tiempo después, mostró otra imagen, en la que se veía el brazo derecho ensangrentado con la leyenda “entre la vida y la muerte”, señala Daily Mail.
Algunos de sus amigos pensaron que estaba “bromeando”, sin embargo la madre del menor aseguró que sólo buscaba pedir ayuda.
Cómo vio que nadie lo “pescaba”, el joven envió otro mensaje, en el que dejó claro que estaba luchando por su vida.
«Si alguien se considera mi amigo por favor llévenme al hospital”, fueron sus últimas palabras.
Finalmente llegó a un centro asistencial, pero el tratamiento para tratar el veneno no dio el resultado esperado y murió 12 horas después de haber sido mordido.
