Hayley Martin está embarazada de su cuarto hijo, sin embargo en el control de las 20 semanas recibió una noticia devastadora.
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Los doctores le dijeron que su hija sufría agenesia renal bilateral, que es la ausencia de ambos riñones y que no sobreviviría cuando naciera.
El médico le dio la posibilidad de interrumpir el embarazo, sin embargo la mujer se negó rotundamente, señala The Independent.
“Ni siquiera lo consideramos”, aseguró Hayley. “No lo haría de otra manera. Ella es mi hija”, agregó la acongojada madre.
La mujer explicó que junto a su marido tomaron la decisión de terminar el embarazo para poder donar los órganos de su hija y salvar la vida de otros menores.
Si bien la enfermedad podría hacer que los órganos de la pequeña no se desarrollen completamente, los padres esperan que a lo menos ciertos tejidos puedan servir para donación.
Mientras esperan el triste desenlace, la pareja espera crear una fundación para ayudar a otras madres en el doloroso proceso.
