Los pasajeros que iban en un bus en el barrio londinense de Shoreditch en Inglaterra se encontraron con una insólita situación a bordo de la máquina: una pareja daba rienda suelta a sus pasiones en frente de todos.
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Primero hubo besos, después la mujer se despojó de la parte superior de su vestimenta y quedó en topless, subiendo sobre el hombre para luego tener sexo en los asientos del medio de locomoción.
El video con esta situación se viralizó rápidamente por redes sociales, mientras que el autor de la grabación, quien iba a bordo del bus, dio a conocer detalles de lo ocurrido.
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«Algunas personas los estaban mirando, pero él se reía y los saludaba mientras la chica gemía», afirmó.
Además, recalcó que «me imagino que no aguantaron a llegar a la casa o quizás él sigue viviendo con su mamá».
Sin embargo, lo más llamativo no fue que la pareja tuviera sexo en el segundo piso del bus, sino que la reacción de los pasajeros. Estos al darse cuenta de la situación, optaron por ignorar el asunto y nadie hizo nada, todos se quedaron tranquilos y continuaron con sus quehaceres pese a tener prácticamente el guión de una película porno frente a ellos.
Todo terminó cuando el conductor de la máquina si decidió actuar y se acercó a los jóvenes a decirles que pararan con la escena y los conminó a bajar del bus.