Un nuevo traspié sufrió la defensa de Nahir Galarza, luego de que el examen toxicológico arrojara que su víctima, Fernando Pastorizzo, no consumió drogas ni alcohol durante la noche de su homicidio.
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Pastorizzo fue baleado dos veces durante la noche del 29 de diciembre. Su atacante confesa terminó siendo su propia pareja, quien se escudó diciendo que todo surgió a raíz de que Fernando era violento con ella y le pegaba. Hasta el momento no se ha podido establecer coherencia con los dichos de la muchacha, pues todos sus argumentos han sido desmentidos a mediada que avanza la investigación.
Esta vez fueron los resultados del peritaje toxicológico realizados a la sangre de la víctima los que arrojaron resultados negativos frente a la duda de si Fernando estaba drogado aquella fatídica noche cuando murió.
El resultado del peritaje realizado por personal de Criminalística de la Policía de Paraná, arrojó que el joven no consumió ningún tipo de sustancia durante esas 24 horas.
El fiscal Sergio Rondoni Caffa recibió los resultados vía mail, pruebas con las que se cae la declaración de Nahir en donde afirmaba que cada vez que salían él tomaba alcohol.
Incluso uno de los abogados de Galarza, Victor Rebossio, declaró para medios transandinos que en el lugar de los hechos fue hallada una bolsa con drogas y por otro lado su manager, Jorge Zonzini, había adelantado la probabilidad de encontrar alcohol o fármacos en la sangre del joven.
Zonzini publicó párrafos de la declaración de testigos, amigos de Fernando, quienes acusaron al joven de haber consumido drogas, haber sufrido un coma alcohólico y haber probado la cocaína.
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Junto con esta divulgación, los abogados de Fernando en el primer instante aseguraron que solo eran calumnias difundidas por el manager, quien ni siquiera tiene acceso a los expedientes.
En su defensa, Zonzini aseguró que «la defensa nunca dijo que daría positivo», y que solo repitieron lo que «los testigos que puso la querella, supuestamente para hablar bien del chico, como son todos pibes de diecinueve años, terminaron diciendo cómo era su modo de vida».
El vocero también destacó que su protegida con 19 años ya asistía a la Universidad, mientras que Pastorizzo a sus 20 no trabajaba ni estudiaba.
Galarza, luego de confesar el crimen, cambió su versión del caso al afirmar que luego de una noche de violencia, en donde supuestamente Fernando la atacó y la tiró del pelo, el arma se disparó por accidente.
Hasta el momento, ningún argumento de la defensa de Nahir se ha podido demostrar con pruebas concretas, e incluso desestimaron la petición de sus abogados al querer incluir la violencia de género dentro de las aristas del caso. La joven seguirá en prisión preventiva mientras dure la investigación.
