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Kim Jong-un vive uno de sus momentos más pacíficos, con frases que nos hacen creer que el verdadero líder norcoreano fue raptado por extraterrestres y quedó un simpático clon a cargo de Pyongyang.
Durante las últimas semanas ha dejado de pelear con Donald Trump sobre quien la tiene más grande (hablamos del botón nuclear), ha dejado de amenazar al planeta con su poderío nuclear y se ha acercado a dialogar con sus vecinos del Sur, enviando una delegación de atletas a los Juegos Olímpicos de Invierno que se desarrollarán en la ciudad de Pyeongchang.
Para los analistas, esta nueva versión de Kim tiene un trasfondo claro: impulsar turística y económicamente a su país gracias a los mencionados juegos, esperando que las personas lleguen a visitar las maravillas de Corea del Norte.
Y dentro de ese marco, acorde a la agencia estatal KCNA y según consigna Daily Mail, el líder asiático realizó un anuncio que demostró que sigue siendo el mismo y que su llamativo comportamiento no ha cambiado: creará un resort de lujo.
El tema es que no estará ubicado en la capital Pyongyang o en el balneario de Wonsan, lugar de veraneo favorito de los norcoreanos: sino que estará en Kangwon, ciudad en donde cayeron tres de los misiles balísticos lanzados por Kim en medio de sus ensayos nucleares.
«Cuando se construya la zona turística, satisfará la demanda de turistas nacionales y extranjeros y será el lugar más ideal para conectar diversos destinos turísticos con la zona turística internacional de Wonsan-Monte Kumgang», señaló el medio.
Además, se indica que habrá «una famosa playa de arena» y que el recinto pondrá al país en un «nivel mundial» en el apartado del turismo.
Sin embargo, no se hace mención alguna a los misiles o en qué estado se encuentra dicha zona producto de los ensayos, por lo que es un misterio para el mundo occidental cómo es ese lugar o si finalmente se terminará erigiendo el mencionado resort.
