La policía de Vigo en España estaba realizando controles de tránsito con el fin de detener las carreras ilegales y las “exhibiciones” a toda velocidad que ponen en peligro a la población.
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Los uniformados pararon un auto cualquiera y se fueron de espaldas cuando le realizaron el test de drogas al conductor, indica Huffington Post.
El sujeto, en lo que ya es considerado todo un récord, dio positivo a todas las drogas que detecta el examen.
Cocaína, opiáceos, anfetaminas, metanfetaminas y THC aparecían en su sistema.
Ahora el hombre será procesado por un “delito contra la seguridad vial” y podría pasar hasta 6 meses en la cárcel.
Por su parte, la Guardia Civil presentó una denuncia por “infracción muy grave de la Ley de seguridad vial” y la multa podría llegar a los 1.000 euros.