Ayer martes comenzó un juicio en la ciudad francesa de Pontoise que ha generado un ácido debate sobre la edad de consentimiento sexual.
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El sujeto en el banquillo es un hombre de 29 años, que a los 28 tuvo relaciones sexuales con una niña de sólo 11, señala The Guardian.
En Francia, no existe una edad legal determinada en la que un menor puede entregar su consentimiento sexual, y sólo el Tribunal Superior del país dictaminó que los niños de 5 años no podían consentir.
Según los abogados del imputado, Marc Goudarzian y Sandrine Parise-Heideiger, el hombre había conocido a la niña en un parque y lo había acompañado a su departamento.
En su argumento, los defensores señalan que “la niña consintió la relación y estaba al tanto de lo que hacía”. Además, indicaron que el hombre había pensado que la menor tenía al menos 15 años, indica AP.
«Tenía 11 años y 10 meses, casi 12 años, cambia la historia porque entonces ella no es una niña”, dijo Marc Goudarzian.
Por su parte, grupos defensores de los derechos de los niños que testificaron en el juicio, apuntaron que el hombre “sabía muy bien que era una niña pequeña» y se quejaron porque los menores “no están protegidos por nuestra sociedad”.
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En tanto, Carine Diebolt, la abogada de la familia de la menor, manifestó que la niña es “demasiado joven” y estaba “confundida como para resistirse”.
Uno de los puntos que más polémica causó, fue el hecho de que la fiscalía pidió formalizar al sujeto por «abuso sexual de menores de 15 años» y no por violación.
El medio inglés asegura que la familia había presentado una denuncia por violación, pero que los fiscales “creyeron que el sospechoso no utilizó la violencia ni la coacción”, por lo que acusarlo de ese tipo de delito iba contra lo que señala la legislación francesa, la que establece la violación como la “penetración sexual cometida por violencia, coacción, amenaza o sorpresa”.
Eso sí, el magistrado que lleva adelante el caso puntualizó que el fiscal había elegido el cargo incorrecto y ordenó una investigación más exhaustiva antes de calificar el delito.
El gobierno de Macron está buscando sacar adelante una ley que determine una edad mínima para el consentimiento sexual y se cree que el límite podría estar entre los 13 y los 15 años.
