Jake Coates y Emmy Collett se conocieron muy pequeños y con el tiempo lo que comenzó como una linda amistad terminó en amor total.
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A los 16 años se confesaron sus sentimientos y luego de una separación debido a estudios y trabajo la pareja volvió a encontrarse en 2015.
El vivía en Sidney y ella en Londres, se comunicaban todos los días, y viajaban constantemente para verse, señala Infobae.
Sin embargo todo cambió en 2016, cuando Emmy fue diagnosticada con cáncer de tiroides. Jake viajó de inmediato a Inglaterra y a las pocas semanas se casaron en septiembre de 2016.
Lamentablemente la enfermedad se extendió y tras una larga lucha, siempre con el amor de su vida al lado, Emmy murió en julio del año pasado.
Cuando la joven luchaba por su vida, la pareja incluso había recurrido a una madre sustituta para convertirse en padres, pero ese intentó no resultó.
Tras la muerte de Emmy, Jake dijo que correría 10 maratones para juntar dinero a nombre de su esposa para luchar contra el cáncer y estaba planeando un viaje a Islandia para prepararse para el desafío.
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Pero antes de partir, una foto en su cuenta de Instagram sorprendió a muchos. A sólo 8 meses de la partida de Emmy, el joven presentó en la redes sociales a su “nuevo amor”, indica The Sun.
Jake partiría a Islandia con su nueva compañera: Jenna.
La foto generó un sinnúmero de comentarios entre los que lo criticaban y los que lo defendían por tener una nueva pareja a sólo 8 meses de la muerte de la que aseguraba que era el amor de su vida, pero lo que sorprendió a todos fue el increíble parecido de la “chica nueva” con su esposa.
Muchos han dicho que el parecido entres ambas es “espeluznante”, mientras algunos van más allá y manifiestan que son “calcadas”.
Jake agradeció a los las palabras positivas porque “realmente significan mucho» y señaló que “los extraños comentarios negativos han sido eliminados porque no tengo espacio en mi vida para la negatividad”.